Marihuana al alimón y en 'caldereto'

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La Guardia Civil se ha topado en Ubrique con dos vecinos que, de bien avenidos que parecían estar, compartían hasta la misma afición, ilegal por cierto: el cultivo de marihuana. Y es que todo apunta que uno habría adentrado al otro en los secretos de la plantación de cáñamo, revelándose éste como un alumno bastante aventajado.

La calle Caldereto ubriqueña ha sido el escenario de esta batida por partida doble que han llevado a cabo agentes de la Benemérita, que se ha saldado con el desmantelamiento de sendas plantaciones caseras que los dos 'colegas' tenían montadas en sus respectivos domicilios.

En casa del que parece ser el alumno aventajado, los guardias se toparon, en la planta baja, con un invernadero en el que había plantados cuatro ejemplares de marihuana, que habían alcanzado los dos metros de altura.

Según las primeras estimaciones, las plantas de droga, con un peso total de 3,7 kilogramos, hubieran reportado unos beneficios en el mercado ilícito en torno a los 11.000 euros.

En la misma casa, los agentes se encontraron con diversas revistas y tratados sobre el cultivo del cáñamo. Igualmente, durante el registro de la vivienda, fueron halladas dos tijeras especiales para el tratamiento de plantas, junto a dos pipas artesanales. Así la cosas, se procedió a la detención del supuesto responsable de dicha plantación, que fue identificado como L.G.R., de 21 años de edad.

La segunda incursión de la Guardia Civil en la misma calle deparó el hallazgo de una plantación prácticamente ya profesional. A bastante más escala estaba cosechando el vecino y supuesto 'maestro'.

Los agentes localizaron, primero, en un patio interior, 17 plantas de marihuana. Una cifra que se incrementó hasta 22 al descubrir otros cinco ejemplares emplazados en otro patio trasero existente en la vivienda de Caldereto.

Otra sala anexa de la casa, además, había sido habilitada como secadero. Durante el registro, la Benemérita procedió también a la intervención de 200 semillas de cáñamo, abono y varias cajas en las que ya estaba la droga picada, lista para su manipulación y venta.

Se estima que con la comercialización de la droga obtenida de las 22 plantas, el ya experimentado cultivador habría conseguido ingresar algo más de 29.000 euros.

Por estos últimos hechos, la Guardia Civil procedió a la detención de M.A.R.F., de 25 años de edad. Tanto él como su vecino de calle y 'colega' de ilícita actividad, en unión de las diligencias instruidas, han sido puestos a disposición del Juzgado de Ubrique.