La vacuna de AstraZeneca sigue creando recelo. En la Policía Nacional han sido varios los casos de agentes que han sufrido sus efectos de manera grave, lo que ha hecho que al menos dos de ellos hayan tenido que ser hospitalizados por tromboflebitis o complicaciones diversas. El que más preocupa es un agente de Jerez que ha sido ingresado en el centro de esta localidad después de que tras recibir la primera dosis de la vacuna sufriera una perforación de tímpano. El tratamiento posterior para curar la infección, con antibióticos y corticoides, podría haber tenido que ver con el hecho desufrir un fuerte dolor en el pecho y un brazo, síntomas compatibles con un infarto, por lo que acudió a urgencias. Allí le diagnosticaron espasmos cardiacos que obligaron a internarlo. Ahora le han recetado un tratamiento con anticoagulantes que deberá tomar meses.

Además, otra agente de Puerto Real sufrió síntomas graves, con fiebre de 40 que le obligaron a acudir al Clínico. Para Jupol "la preocupación crece porque ya son varios los compañeros que están ingresados. Ahora le vacunación se reanuda el miércoles pero son ya muchos compañeros los que nos dicen que tienen dudas sobre si vacunarse o no".

Jupol, además, pide que las bajas que se hayan producido por culpa de la vacunación sean consideradas enfermedades profesionales. "Una cosa es coger el covid, que has podido cogerlo en cualquier sitio, y otra que te tengas que dar de baja porque te vacunen. Pensamos que no es justo encima perder dinero de tu nómina por este motivo", dicen desde Jupol.