El comandante de la Flotilla de Aeronaves, el capitán de navío José Luis Nieto, habla sobre el Centenario, que vivirá esta semana sus actos centrales en Rota, y sobre pasado y presente de la aviación naval.

-¿Cómo está viviendo este año tan especial?

-Como comandante de la Flotilla de Aeronaves vivo este momento consciente de la responsabilidad de contribuir a dar a conocer la historia de la Aviación Naval española, de sus hombres y mujeres, sabiendo que esta efemérides es una oportunidad inmejorable de valorar en su justa medida todo lo conseguido hasta la fecha, y reflexionar sobre los importantes avances de la aviación embarcada, que ha sabido afrontar y superar enormes retos gracias a la labor de equipo y a las decisiones y aciertos de muchas personas. En ese sentido, confío que podamos reflejar una parte de las gestas que se esconden tras cada uno de los hitos alcanzados, y así rendir un sincero homenaje a todos aquellos marinos del arma aérea que dejaron su vida en el empeño.

-¿Qué ha significado el arma aérea en la evolución de la Armada?

-En la exposición de motivos del Real Decreto de creación de la Aviación Naval en 1917 se reflexiona sobre dos ideas fundamentales, por un lado que "la experiencia de la guerra actual demuestra que una Aviación Naval especializada es completamente indispensable para la defensa nacional", y que "esta organización debe operar en unión de las escuadras y ser manejada por personal que pertenezca a la Marina de guerra". La realidad de las operaciones navales de estos últimos cien años, y el análisis de los complejos escenarios de seguridad del futuro, siguen demostrando que las reflexiones de aquellos años siguen siendo válidas. Así, la capacidad de combatir en la mar y desde la mar de las marinas de guerra se basa en gran medida en disponer de una aviación embarcada versátil y tecnológicamente avanzada. En este sentido los aviones, helicópteros y drones de la Flotilla de Aeronaves, sus hombres y mujeres, contribuyen singularmente a las capacidades de la Flota, y son elementos fundamentales en las operaciones navales. Así, unidades aéreas de la Flotilla han participado en la mayoría de las misiones en las que ha estado presente la Armada. En la actualidad, están desplegadas en la operación Atalanta contra la piratería, en la operación Sophia contra las mafias responsables del tráfico de seres humanos y en las Agrupaciones Navales Permanentes de la OTAN.

-En agosto se recibió el cuarto helicóptero AB212 modernizado para la Tercera escuadrilla y estaba prevista la llegada un nuevo SH-60F Seahawk, ¿cómo van estos proyectos de modernización?

-La modernización del AB-212 ha conseguido mejorar significativamente sus capacidades, en especial las de vigilancia y seguridad marítima, como demuestra su eficacia en la operación Sophia en la que hemos incorporado el nuevo helicóptero, que denominamos AB-212 Plus, a bordo de nuestras fragatas desde principios de este año. Esperamos finalizar la modernización en el 2018. Por otro lado, para mantener la capacidad del helitransporte táctico de tropas, la Armada apostó por la adquisición de SH-60F modificados para sustituir progresivamente a los SH3D. Estos helicópteros son muy similares a los SH60B que ya disponemos, por lo que su incorporación a la Flotilla de Aeronaves, además de permitirnos mantener el helitransporte de la Fuerza de Desembarco de Infantería de Marina desde nuestros buques anfibios, facilitará una racionalización de nuestro material y por tanto mejorar la eficiencia en el sostenimiento. Hemos recibido el primer helicóptero a principios de agosto y el segundo esperemos que llegue antes de final de este año.

-Hace apenas tres años se creó la Undécima escuadrilla, ¿qué están aportando estos aviones no tripulados?

-Los vehículos aéreos tripulados remotamente (RPAS) son sistemas de pequeño tamaño y grandes capacidades, constituyen un elemento novedoso en las operaciones que permite realizar tareas de vigilancia, reconocimiento e inteligencia con total discreción y seguridad. Además, estos medios permiten una gran persistencia sobre el objetivo minimizando el riesgo de las aeronaves tripuladas, por lo que son muy valorados. Desde el año 2014, la Armada ha incorporado en sus buques y en las operaciones reales que realiza el RPAS Scan Eagle que ha sido desplegado en tres ocasiones en la Operación Atalanta de lucha contra la piratería en el Cuerno de África y que ha tenido una actuación que podríamos calificar de sobresaliente. Por ahora la Undécima Escuadrilla cuenta con dos sistemas Scan Eagle completos y está previsto que al final de este año llegue un tercer sistema.

-Las bases de las escuadrillas están en la provincia, ¿cómo es el estado de sus instalaciones?

-Me alegro mucho de esta pregunta, ya que estoy convencido que el traslado de la Flotilla de Aeronaves a Rota en la década de los años 50 fue un gran acierto, ya que no podríamos haber alcanzado las metas que nos hemos fijado sin el cariño de esta maravillosa tierra y de su gente, a la que servimos y que tanto nos apoya. La Flotilla de Aeronaves actual es un claro ejemplo de la visión de futuro de la Armada desde su creación, y del liderazgo y capacidad de superación ante la adversidad de sus hombres y mujeres. Conviene destacar la contribución singular que en esta historia tuvieron el Capitán de Navío Pedro Cardona Prieto, verdadero precursor de la Aeronáutica Naval, y del Almirante Saturnino Suanzes de la Hidalga, impulsor decidido de la moderna Arma Aérea. Actualmente las instalaciones de la Flotilla son adecuadas a las tareas que tenemos encomendadas, tienen sus años, pero con esfuerzo y dedicación las mantenemos en buen estado.

-La demostración de Rota será el colofón al Centenario, ¿cómo van los preparativos? ¿Qué previsiones manejan?

-Contaremos con la participación de aeronaves del Ejército de Tierra y del Ejército del Aire así como de otras aeronaves de marinas aliadas. La Armada participará con todas las aeronaves de la Flotilla y los aviones AV-8B Plus operaran desde el LHD Juan Carlos I. Creo que será un buen colofón a estos actos que deben servir de homenaje a todos los que nos precedieron, especialmente para aquellos que dejaron su vida en el empeño. Su recuerdo debe servirnos de estímulo y trampolín que nos impulse a seguir trabajando con perseverancia por el arma aérea, la Armada y España.