Estaban marcados con una cruz que presagiaba lo peor. 89 árboles de la Barriada Río San Pedro se encuentran bajo el tendido eléctrico y debían ser talados "por motivos de seguridad". De hecho, el Ayuntamiento de Puerto Real concedió en el mes de abril, la licencia para la eliminación de 49 ejemplares que, según explicaron, "eran insalvables, porque la Ley de Prevención de Incendios, así lo obligaba".

Finalmente se ha conseguido llegar a un acuerdo con Endesa y se ha optado por una solución menos agresiva. Según el responsable de Urbanismo en el Ayuntamiento de Puerto Real, Juan Carlos Martínez, "se ha ofrecido a la empresa concesionaria del mantenimiento del corredor eléctrico de Endesa, Thaler S.A, la opción de ejecutar un poda especial que elimine los problemas de incendio". Así, y a instancias de Endesa, Thaler ha ejecutado su derecho de renuncia a la licencia de la obra menor que le facultaba para realizar las citadas talas, expediente que ha aceptado el Área de Urbanismo del Ayuntamiento, poniendo fin al a la licencia solicitada en un primer momento. Por lo tanto, todos los arboles que se encuentran en la principal arteria de la barriada del Río San Pedro, la Avenida Argentina, no serán talados y sí podados. Los únicos ejemplares que no se podrán salvar son una palmera Washingtonia y dos Pinus pinea situados en suelo clasificado como Sistemas Generales de Equipamiento calificado como zona verde, en las cercanías del campus universitario de Puerto Real.

Una vez resuelto el problema, Martínez se ha dirigido a los grupos políticos, que "crearon una alarma social ante un hecho que no había ocurrido; consideramos fuera de toda ética provocar un miedo inexistente, ya que ningún árbol será talado; poner el grito en el cielo por algo que no ha sucedido es una forma de hacer política que no se ajusta al carácter de servicio público que los grupos políticos debemos preservar".

Desde que los árboles fueron marcados se inició una campaña por parte de Equo Los Verdes de Puerto Real bajo el lema Pinos sí, cables no, precisamente para solicitar lo que ahora se ha conseguido. Alrededor de medio centenar de personas se concentraron en la barriada para pedir al Ayuntamiento que no autorizase la tala a Endesa y para que obligase a la empresa a tomar una decisión menos agresiva para el entorno.

Además de la campaña de Equo, se inició otra en el portal Change.org en la que se recogieron más de un centenar de peticiones de ciudadanos, dirigidas al Ayuntamiento y a Endesa para que se suspendiese la tala.