El buque anfibio Castilla de la Armada partió este domingo para llevar a La Palma las lanchas de desembarco del Grupo Naval de Playa y ayudar a los agricultores de La Palma afectados por el volcán. El equipo de reconocimiento dio días atrás el visto bueno para que las embarcaciones puedan llegar a plantaciones plataneras de la costa a las que no se puede ya acceder por tierra por las coladas de lava y efectuar la petición del Cabildo de la isla.

El Castilla zarpó de la Base naval de Rota este domingo sobre las cinco de la tarde. Transportaba cuatro lanchas de desembarco del Grupo Naval de Playa, con sede en San Fernando, en La Carraca, así como un helicóptero y un equipo sanitario. El barco permanecerá en la zona “mientras persistan las necesidades”, apuntó la Armada.

El Cabildo de La Palma había solicitado ayuda a la Armada para desplazar a agricultores canarios desde el puerto de Tazacorte hasta las plantaciones plataneras localizadas en la costa y cuyas vías de comunicación terrestre han quedado interrumpidas por las coladas del volcán de Cumbre Vieja.

El Buque de Acción Marítima Tornado junto a buceadores de la Unidad de Buceo de Canarias y personal del Grupo Naval de Playa y Tercio de Armada evaluaron estos días si pudiera llevarse a cabo la solicitud con lanchas de desembarco y las condiciones resultaron positivas.

Las unidades gaditanas sumarán así una nueva misión en el volcán de La Palma. En la zona ya está el buque hidrográfico Malaspina, que colabora en las distintas actuaciones a raíz de la erupción. El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) solicitó a la Armada, a través del Real Instituto y Observatorio de la Armada (ROA), una plataforma para el despliegue en la costa de poniente de la isla de dos Sismómetros de Fondo Marino (OBS) de banda ancha y el buque se puso a disposición para su transporte desde Cádiz y el posterior fondeo.

La marina española tiene un planeamiento listo para su actuación en La Palma. Si fuera necesario “y el Gobierno nos diera las órdenes oportunas”, tienen unidades para estar preparadas en pocas horas, según explicó el comandante del Cuartel Marítimo de Alta Disponibilidad, el vicealmirante José María Núñez Torrente, a la preguntas de los periodistas en el ejercicio Flotex, como así se ha comprobado con el buque Castilla.