Cada vez son más los vehículos que, correspondiéndoles el paso por la revisión en las ITV, no se presentan a ellas. Así, los datos oficiales ofrecidos por AECA-ITV en un repaso de la actividad de estas instalaciones durante el año pasado, han revelado que frente al desistimiento de un 26,6 por ciento desde 2017, en la actualidad la cifra ha aumentado hasta un 34 por ciento.

Estos coches, que no se enfrentan a una situación temida por sus propietarios, pueden ser sancionados en tanto que circular sin la ITV al día o aprobada puede suponer una multa de 200 euros, al margen de que las compañías con las que tienen suscritos sus seguros podrían no cubrir los daños en caso de accidentes.

Por otro lado, un 81,4 por ciento pasan con éxito a su primera visita la revisión en la ITV, mientras que el 18,6 por ciento que no lo hace tiene defectos.

El 34 por ciento de los fallecidos en siniestros viales se producen en horas de baja visibilidad, de ahí el importante papel de mantener estos elementos en buen estado.

Estos, en el 24 por ciento, son achacables a alumbrado y señalización, lo que reduce las condiciones de visibilidad especialmente en condiciones de baja luminosidad o de noche; en el 21 por ciento a defectos en ejes, ruedas, neumáticos o suspensión; mientras que el 19 por ciento de los rechazos tiene un incorrecto funcionamiento de los sistemas de emisiones contaminantes. Este factor ha aumentado tres puntos en el último año. El cuarto defecto que supone el rechazo por defectos graves detectados, alcanzando un 13 por ciento, son los frenos.

Entre las imágenes presentadas por AECA-ITV para ilustrar su informe figuran algunas como éstas, con ausencia de banqueta en uno de los asientos de un autobús o neumáticos con la banda de rodadura desprendida.

Las cifras aportadas por AECA-ITV muestran que furgonetas y camiones de más de 3,5 toneladas son los vehículos que pasan por la revisión en peor estado y, consecuentemente, con mayor número de rechazos: hasta un 28,8 por ciento no pasan la ITV a la primera oportunidad. A ellos les siguen los autobuses y autocares, con un 25,7 por ciento de los suspensos y tras los que se encuentran las furgonetas y camiones de menos de 3.500 kilos, con un 24,4 por ciento de revisiones desfavorables. En sentido contrario, los vehículos que en mejor estado se presentan a las ITV son los agrícolas, con un 85,8 por ciento de las inspecciones favorables.

Según Guillermo Magaz, director gerente de AECA-ITV, "el hecho de tener vehículos cada vez más antiguos circulando, unido a un incumplimiento en la ITV superior al 30 por ciento, tiene que despertar una gran preocupación en las autoridades, pues se trata de una situación que tiene efectos muy negativos en la seguridad vial y en el medioambiente".

Esta preocupación responde a que hoy la edad media del parque de vehículos es de 14,9 años, lo que revela un aumento de un 10,4 por ciento en los últimos cinco años, y que la DGT liga la mayor antigüedad de los vehículos al riesgo de sufrir accidentes. Así, entre 2019 y 2021 aumentó el número de turismos implicados en siniestros con fallecidos que tenían más de 10 años y sin la ITV en vigor. En cuanto a las motocicletas, la cifra alcanza un 26 por ciento y, en el caso de vehículos industriales, el crecimiento fue del 163 por ciento.