En familia. Así se podría calificar el homenaje que ayer recibió en su ciudad, en la plaza del Polvorista, el poeta Rafael Alberti, tras haberse cumplido hace tan solo unos días el décimo aniversario de su fallecimiento.

En torno a medio centenar de personas se dieron cita pasadas las siete de la tarde junto al busto del universal portuense, que para la ocasión había sido ataviado con una bandera roja del Partido Comunista sobre los hombros. No en vano el homenaje lo organizaban el PCE, Izquierda Unida y Juventudes Comunistas. Por parte de Izquierda Unida estuvieron presentes los concejales portuenses Julio Acale, José Manuel vela y Ángeles Mancha, así como la coordinadora local, Pura Fernández. En representación del PCE estuvo el secretario general de la formación en Andalucía, Javier Mohedano. No acudieron finalmente, tal y como se había anunciado, ni la escritora Rosa Regás ni el periodista y escritor Juan José Téllez, aunque sí enviaron sendos textos que fueron leídos ante los asistentes.

Estaban también el amigo y estudioso de la obra del poeta Francisco Arniz (que poco después presentaba un libro en la Fundación Alberti dentro de la nueva línea editorial creada por la institución), el ex-alcalde comunista Rafael Gómez Ojeda, el coordinador local de Ecologistas en Acción, Joaquín Paloma, y pocas caras conocidas más. Una señora apremiaba a su marido a marcharse del acto tras saber que no acudiría Rosa Regás, a la que tenía interés en conocer. La viuda del poeta, María Asunción Mateo, ya había dicho pocos días antes, al ser cuestionada sobre este asunto, que no tenía previsto asistir al acto ya que nadie la había invitado, ya que ni siquiera tenía conocimiento de que iba a celebrarse. El acto oficial, por tanto, con la presencia de la presidenta de la Fundación, se celebraba poco después a poca distancia, en la sede de la Fundación Rafael Alberti, con motivo de la presentación del libro Los espacios habitados de Rafael Alberti y curiosamente muy pocas de las personas que estuvieron en el homenaje en la calle coincidieron después en la presentación del libro. Dos actos de homenaje pero entendidos de distinta forma.

En el acto celebrado en la plaza del Polvorista se hizo hincapié en el compromiso político que mantuvo Rafael Alberti durante toda su vida. Como explicaba al principio del acto un representante de Juventudes Comunistas, "el objetivo de este acto público es reivindicar no solo la obra de Rafael sino también sus ideas, recuperar su palabra y su voz, la voz de Alberti que sigue estando viva, a pesar de que muchos quieran silenciarle", dijo.

Para los organizadores, el lugar escogido para la celebración del homenaje era el más apropiado ya que además de levantarse en la plaza la efigie de Rafael, detrás está el Ayuntamiento "en el que fue nombrado alcalde perpetuo de El Puerto" y al otro lado de la plaza está "el teatro que para nosotros debió llevar el nombre de Rafael Alberti", recordó, refiriéndose a la polémica que se suscitó en su día cuando el Pleno de la Corporación, nada más fallecer el poeta, aprobó a propuesta del Partido Popular que el nuevo teatro, aún sin construir, llevara el nombre de Rafael Alberti, una decisión que años más tarde modificaría el mismo Partido Popular (aunque ya con otros responsables al frente) para designarlo finalmente con el nombre de Pedro Muñoz Seca.

Además de la bandera comunista que cubría los hombros del busto de Alberti, varias banderas republicanas y otras de Juventudes Comunistas exornaban el enclave, iluminado por un potente foco ya que a las siete de la tarde era ya prácticamente de noche.

Tras la lectura de los textos enviados por Rosa Regás y por Juan José Téllez tomó la palabra el secretario general del PCE, Javier Mohedano, que destacó que "compromiso y poesía eran para Rafael Alberti las dos caras de la misma moneda. Nunca sacrificó el compromiso por la excelencia artística, sus armas eran lo poemas", dijo, para añadir que fue "un digno representante de las vanguardias". Tras las distintas intervenciones, se procedió a la lectura de una serie de poemas entre los que se puede citar Un fantasma recorre Europa, el poema de Fustigada luz dedicado a Pablo Neruda o el poema dedicado a Antonio Machado. El grupo Ojalá interpretó después diversas canciones con letra de poemas de Rafael Alberti y otras de artistas como Silvio Rodríguez o Joan Manuel Serrat.

Al final del acto los asistentes entonaron La Internacional y realizaron una ofrenda de claveles rojos que depositaron, uno a uno, ante el pedestal del busto que recuerda al poeta.