Pepe Ruiz Girón nació hace 48 años en Cádiz y el pasado sábado 11 de septiembre, en aguas de Altea (Alicante), junto a Fran Martínez, se proclamó campeón mundial +100 de la clase Flying Dutchman de Vela, y en la general absoluta, la pareja consiguió la medalla de bronce.

Dos títulos logrados con el barco 'Timón de Roche Avancia Godello' que marcan un hito en la historia de la Vela en España. Pepe Ruiz, el lunes, y todavía con la emoción y la adrenalina de la hazaña deportiva, se incorporaba a su trabajo en el restaurante 'Timón de Roche', en Conil.

Pepe y Fran es la primera pareja que consigue el título mundial +100 para España. Las felicitaciones a todos los niveles han sido numerosas y este lunes el presidente de la Federación Española de Vela, Javier Sanz, les informaba que se iban a mandar al Consejo Superior de Deportes (CSD) toda la documentación necesaria para que, tras el espectacular resultado obtenido en el Mundial, ambos fueran considerados ‘deportistas del más alto nivel’.

La competición en Altea ha sido durísima con los rivales más fuertes del mundo y que poseían varios títulos mundiales y olímpicos. Los húngaros, que fueron los ganadores y demostraron su superioridad han sido siete veces campeones del mundo, mientras que holandeses (cuartos) poseían dos mundiales, o Peggy Barth (sexta) había representado a Alemania en las olimpiadas en la clase 470, por poner algunos ejemplos del historial de los participantes en este mundial de Altea. Pepe Ruiz y Fran Martínez superaron a la pareja holandesa en una última regata, a prueba de infarto, pero con final feliz para el gaditano y el cartaginés. Lograron el bronce y título en +100, categoría para parejas que sumen más de 100 años.

Pepe Ruiz recuerda: "Después de estar todos los días en puestos de podio llegamos a la última prueba con un solo punto de ventaja sobre los holandeses y con una carta en la manga, un descarte de un 7, teníamos una pequeña ventaja. Tomamos la última baliza en tercera posición, los holandeses sextos, pero muy cerca; la llegada estaba a dos millas, tuvimos que marcarles en una guerra de viradas en la que poco a poco nos iban alcanzando hasta que a unos 50 metros de la meta nos sobrepasaron. Tal fue la guerra de viradas que traspasaron la línea en séptima posición y nosotros en la novena dándonos el triunfo sobre ellos el descarte del 7, en los que no solo nos jugábamos la tercera posición absoluta sino además el primer puesto del mundial +100".

Cuenta el final. "Llegamos a tierra desorientados haciendo cuentas, pero al ver la cara de los holandeses y que nos abrazaban y nos daban la enhorabuena salimos de dudas. También nos reconfortó la felicitación de la alemana Peggy Barth, una supercampeona y olímpica. En el podio lucimos la bandera de España porque era una gran hazaña como todo el mundo lo ha reconocido, incluso nuestros rivales, algunos de gran experiencia en campeonatos, pero a los que pasamos volando, porque nuestro barco iba muy rápido".

La pareja española no es profesional, sino amateur en la clase Flying Dutchman, que está consideraba como una de las más difíciles y de prestigio: "El que regatea en esta clase se enamora por su espectacularidad y su técnica". 18 años lleva Pepe Ruiz en esta clase habiendo conseguidos seis campeonatos de España, varios internacionales y participado en tres mundiales y dos campeonatos de Europa: "La verdad es que, tras ganar en junio el campeonato de España, fuimos al Mundial muy ilusionados, con un barco muy rápido, pero sabiendo que los rivales eran muy poderosos. Nosotros nos dábamos por satisfechos con hacer top 10, entre los 84 participantes".

"¿Dónde ha estado la clave? En la concentración, en trabajar en equipo", comenta Pepe Ruiz. "Nos planteamos no meternos en líos y correr, siempre seguimos con la misma línea en el campeonato. Antes de la penúltima prueba hablamos Fran y yo. Luego salimos a por todas, pero tranquilos, contentos y a disfrutar. Luego está el mar, el viento, la automatización de las maniobras, la técnica y la visualización del campo de regatas, al final, logramos algo para la historia, en Cádiz, Andalucía y España. El barco ‘Timón de Roche’ ya es conocido como un referente en la Vela Internacional".

Con el patrocinio de Bodegas Avancia Godello, el barco corrió en aguas alicantinas como un galgo en tierra. "Es de agradecer la apuesta que hizo por nosotros, tras el campeonato de España, Jorge Ordóñez, que sin saber nada de vela confió con nobleza. Con el resultado final ha flipado en colores".

Algo curioso, Pepe Ruiz y Fran Martínez regatearon representado al Club Náutico de Torrevieja. El deportista gaditano lo tiene claro: "En Torrevieja todos son facilidades, nos pagan las inscripciones, varada gratuita, a nuestra disposición neumática y entrenador. Le estamos muy agradecidos". Jorge Ordóñez propietario de Avancia Godello, no solo le dio la enhorabuena a la pareja de regatistas, sino que comentó a los ganadores, con la nobleza que le caracteriza, que "es un honor patrocinar a este barco y a estos dos hombres que han hecho un esfuerzo titánico y han demostrado su clase y categoría consiguiendo algo muy importante para la Vela española".

'Súper' Paco, sobre lo que significa este logro deportivo para el Timón de Roche, recordó que "yo no quería que ninguno de mis hijos se dedicara al fútbol, prefería la Vela, donde hay menos tensión y hay que aguantar menos. Pepe ha logrado algo importante y ahora el 'Timón' es una referencia gastronómica a nivel nacional, y otra referencia en la vela internacional. Es para estar contento, no?".