El Conil no pudo celebrar con una alegría su primer encuentro del nuevo año al perder en el encuentro inaugural de la segunda vuelta contra el Gerena en el Municipal Pérez Ureba, un fortín hasta la fecha que dejó de serlo frente a los sevillanos.

La posición clasificatoria del rival, en la zona noble, hacía presagiar un partido complicado y así se confirmó desde los compases iniciales, ya que el equipo jandeño no se encontró cómodo ni fue capaz de mostrar su mejor imagen. Tan gris como la lluviosa jornada.

Para colmo, en la recta final de la primera mitad Salvador Blázquez adelantó a los visitantes, que se encontraron con el mejor escenario posible para sumar en la localidad conileña pese a que todavía quedaba un mundo por delante.

En la reanudación, Jesule movió ficha desde el banquillo, introdujo cambios para conseguir más profundidad con el objetivo de inquietar con más asiduidad el marco de Fermín García y los amarillos lo intentaron por todos los medios.

Sin embargo, la realidad es que el Gerena se defendió con mucho orden y disciplina, mantuvo la serenidad y tampoco concedió en exceso. Los minutos transcurrían ante la impotencia del Conil, que terminó ahogándose en un quiero y no puedo que le coloca más cerca de la parte templada de la tabla que de las posiciones de arriba.