De nuevo la misma historia. El San Fernando CD dio un paso atrás en sus intenciones de abandonar los puestos de descenso y volvió a caer derrotado ante un rival, el San Sebastián de los Reyes (1-0), que, para nada, fue superior, que hizo muy poquito para conseguir la victoria, pero que se llevó los tres puntos en litigio, merced a su acierto de cara a puerta.

El equipo isleño tiene varios males endémicos esta temporada. De un lado, son innumerables las ocasiones en las que el cuadro de La Isla ha tenido que variar su sistema con respecto al once inicial en el transcurso de la primera media hora de juego. Ante el Sanse, por enésima, Pablo Alfaro se vio obligado ha hacer un cambio en contra de lo que pretendía. Fue Rafa Páez, en esta ocasión, como en anteriores partidos lo han sido Dani Aquino, Dani Molina o David Ramos, el que tuvo que abandonar el rectángulo de juego lesionado.

Otro de los males endémicos con los que tiene que luchar el conjunto de San Fernando es el de crear cien y una oportunidad sin resolver ante el marco contrario y ver, por otra parte, como el rival, con timidez, casi sin querer, llega a portería y pone el partido cuesta arriba. El local Pedro Benito, como viene siendo habitual, marcó en la primera aproximación del delantero ante su ex equipo.

Y eso que el partido comenzó malo de solemnidad. Pablo Alfaro no había variado en mucho lo que le había dado resultado en Mérida o en casa ante el Dépor. El técnico maño puso en liza, de nuevo, a los cuatro centrales con los que cuenta en la zaga, poniendo a Farrando y a José Carlos como laterales derecho e izquierdo respectivamente y a Rafa Páez y Sergio Ayala como centrales. Por delante, cambió la ficha de Alfonso Martín por la David Ramos tras cumplir su partido de sanción, y en el enganche estaban Dani Molina y, en lugar de Bicho, Ilyas Chaira que actuaba de medio punta. Las bandas no tuvieron cambios con Biabiany y Gabri Martínez y el peón de ataque pasó de ser Dani Aquino, que la semana pasada se retiraba lesionado, por Rubén del Campo que tuvo una gris primera mitad.

Sin muchas alteraciones, sin mucho ritmo, como pausado fueron transcurriendo los primeros minutos de un choque que tuvo su tentativa en el disparo lejano de José Carlos a los cuatro minutos de juego, ese que repelió un bien colocado Pedro López.

Ninguno de los dos contendientes parecían tener muchas ganas de entablar contacto con el marco contrario, aunque las ocasiones, como casi siempre, eran para los isleños que pudieron desestabilizar la balanza en el 9’ en un centro de Gabri Martínez que remató tímidamente Rubén del Campo de cabeza y no llegó Biabiany en el segundo palo.

Hasta ahí todo era normal, correcto, si florituras. Pero en el 12' llegó el tanto de Pedro Benito, en una nueva pasividad isleña, en un balón que el ex azulino conectó dentro del área para lanzar cruzado lejos de las manos de Perales.

Tocaba de nuevo remar en contra de corriente y los isleños, que ya parecen haberse acostumbrado a estas lindes tomaron el mando del partido. En el 15’ un pase de Rubén del Campo a Ilyas Chaira dentro del área fue rematado por el segundo a las manos de Pedro López, y en el 17’ un córner lanzado por Dani Molina encontró a Rafa Páez que en franca posición no acertó con la portería rival.

Los locales solo inquietaron en el 33’ en un disparo de Mecerreyes lejano y alto y, cuando la primera parte expiraba en el 42 una internada de Biabiany tuvo un disparo raso abajo que atajó el cancerbero local. La última de la primera parte la tuvo el propio Biabiany en un centro de Ilyas Chaira que remató de cabeza y el balón estuvo a punto de entrar.

Con ello terminó la primera y la segunda comenzó eléctrica por parte del equipo de Pablo Alfaro que vio como a los pocos segundos de comenzar el segundo periodo Gabri Martínez se plantaba en solitario ante Pedro López y disparaba flojo a las manos del cancerbero.

El segundo acto tuvo como protagonista del balón al equipo de Pablo Alfaro que dominó a un rival que se acomodó en su parcela, que no vio peligrar en demasía el resultado cosechado con lo que se había hecho, muy poquito. Los isleños dominaban, pero no encontraban, en ningún momento, la fórmula para romper el entramado defensivo de un San Sebastián de los Reyes que se sacrificaba en defensa y buscaba la oportunidad, a través de una contra, de terminar de sentenciar el partido.

La más clara la tuvo Gabri Martínez, tan afortunado en las carreras como desafortunado de cara al gol. El extremo se encontró un centro abajo de Lanchi en el segundo palo en solitario y, de nuevo, volvió a errar.

El partido transcurría con el quiero y no puedo de los isleños y la comodidad de los madrileños que vieron como su oportunidad se difuminaba en el 83’, cuando el cuadro azulino estaba volcado y en una rápida contra un centro de Villapalos dejó en franquicia a Raúl Hernández cuyo remate, solo bajo los tres palos, se marchó fuera. La única oportunidad de empatar en el tramo final que tuvieron los isleños fue un despeje de Villapalos en su área que obligó a su compañero a mandar a córner y poco más.

Luego vino el penalti no pitado a Pedro Benito de Farrando y más luego llegó otra más clara todavía en un mano a mano de Rafa de Vicente ante Perales que lanzó el delantero fuera. Los isleños estaban planos, sin ideas y sin fórmula para igualar una contienda que nos recordó tiempos pasados y son ya muchos partidos perdiendo de esta forma.