"Con casi toda seguridad se va a notar la presencia de más gente", señala el presidente de la Asociación Chiclanera de Hostelería, Vittorio Canu, de cara a estos próximos días una vez que se han rebajado las restricciones en Chiclana en cuanto a la eliminación del cierre perimetral. Cabe reseñar que tanto  comercios no esenciales como hosteleros se han visto perjudicados con el confinamiento del municipio desde el pasado 23 de enero.

En este sentido, los hosteleros ven como una buena oportunidad la apertura de Chiclana a otras poblaciones del entorno. Y, aunque la climatología está restando afluencia, a lo largo del día se ha registrado un incremento de vehículos entrando en la ciudad y durante las próximas jornadas del puente se prevé la presencia de más visitantes. Según explica Canu, se espera la llegada de un buen número de propietarios de segundas residencias en Chiclana que no han podido desplazarse hasta la ciudad a causa de las restricciones. Sobre todo procedentes de San Fernando o Cádiz. "Aparte habrá visitantes de municipios cercanos que darán un cierto desahogo a bares y restaurantes esparcidos por toda Chiclana, en especial en la zona de la costa", apostilla Canu.

El presidente de los hosteleros apela a la prudencia y a la responsabilidad con vistas a que Chiclana retorne a "cierta normalidad" y que se trata de un paso más para que se asiente la actividad hostelera y comercial con las visitas de miles de personas que podrán recalar de nuevo en la ciudad después de casi un mes de cierre perimetral.