Chiclana entrega sus Insignias de Oro a cuatro nombres que la engrandecen
El Teatro Moderno acogió ayer el acto de reconocimiento a distintos referentes de la localidad
El alcalde de Chiclana inaugura la muestra 'Huellas', de José Luis Aragón
El Día de la Constitución sirve desde hace años como marco para reconocer a aquellos chiclaneros que han contribuido a hacer crecer el nombre de Chiclana. En esta ocasión, las Insignias de Oro de la ciudad fueron a parar a cuatro referentes conocidos por su papel social y su ejemplo personal. Así, José Luis Aragón Sánchez, Mª Ángeles Amado Rodríguez y Ramona Sánchez Marín acudieron al Teatro Moderno para recoger sus Insignias:un reconocimiento que también incluyó a Emilio Oliva Baro a título póstumo, que recibió el premio en manos de su hija, Cayetana.
El alcalde de Chiclana, José María Román, se encargó de felicitar públicamente a los galardonados en un acto en el que recordó también cuestiones de actualidad que afectan a la vida de los chiclaneros –como la regulación del río Iro o el desafío que supone el crecimiento de la ciudad–.
Los galardonados en estas Insignias de Oro proceden de distintos ámbitos y tienen diferentes perfiles, pero todos comparten el rasgo de haberse implicado de forma significativa en el día a día de Chiclana, o de haberse encargado de hacer de la ciudad un referente.
Así, el ceramista José Luis Aragón Sánchez (Chiclana, 1941) hubo de acudir a la Barcelona de los años sesenta para especializarse como artista en la Escuela Massana. De ahí, pasó a París con una beca para la escuela Métiers d´Art, profundizando en sus conocimientos sobre cerámica industrial, artística y artesanal. Su primera exposición personal sería, de hecho, en París, en una época en la que pasaría a formar parte del movimiento fantástico. A lo largo de su trayectoria, ha ejecutado más de 5.000 piezas para la campaña de promoción de la manzanilla y langostino de Sanlúcar, y ha visitado un total de 32 países con el objetivo de conocer diferentes técnicas de la cerámica.Recientemente, Aragón Sánchez pasó a ser miembro de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla.
Por su parte, Mª Ángeles Amado Rodríguez ha trabajado como socorrista en Aqualand, cosiendo encargos particulares y en la guardería municipal de El Puerto. Actualmente, forma parte del área de bienestar social del Ayuntamiento portuense. De su implicación con Chiclana dan cuenta sus años como catequista, su compromiso con el Coro de Nuestra Señora de los Remedios o con la Hermandad de la Soledad y Santo Entierro, su participación activa en la Asociación de diabéticos o su disposición a actuar como familia de acogida durante los últimos diez años.
Otro ejemplo de participación social es Ramona Sánchez Marín ‘Momi’ (Chiclana, 1947):hija de montañés, era conocida ya de pequeña por colaborar en la tienda de ultramarinos de su familia, demostrando con los años –junto a su marido– su disposición a ayudar desinteresadamente. Ambos han dedicado toda su vida a trabajar y ayudar a los demás en todo lo que han podido, siempre serviciales y prestando atención a los necesitados.
El mundo del toro marcaría la vida de Emilio Oliva Baro desde su nacimiento, que se produjo en Madrid, ya que Antonia Baro tuvo que desplazarse hasta la capital cuando su marido (el torero Emilio Oliva) recibió una grave cornada en Las Ventas. Su primogénito cogería por primera vez la muleta con 13 años, en Vejer, y tomaría la alternativa en la temporada de 1985, en El Puerto. De allí, iniciaría una trayectoria en el mundo taurino que lo llevaría por toda España, Francia ySudamérica. En sus últimos años, la carrera de Emilio estuvo ligada al turismo y a su Chiclana natal.
También te puede interesar