Tablas del Cádiz B en el Nuevo Mirador (1-1), un campo que en los últimos años se le da bastante bien tanto en Tercera como en Segunda B. Los amarillos tuvieron hoy desparpajo, ese descaro como no se les ve otras veces y mucho balón en sus pies, que pudo ser una de las claves que maniató en bastantes momentos a un Algeciras que no esperaba verse en un papel tan secundario.

Juanma Pavón apostó por el once esperado pero fue más llamativo la presión tan alta y el liderazgo en el  juego llevando el control y la posesión, lo que daba lugar a unos guiones cambiados de antemano. Muy bien el filial en el primer tercio del choque porque fue capaz de someter a su rival con el balón en su poder y llegadas al área, siendo la ocasión más clara un testarazo de Saturday que Pablo Ganet sacó cuando el esférico apuntaba gol.

Sin embargo, al Cádiz B le volvió a penalizar de forma contundente su primer error. Una falta ejecutada por Cristo Martín la defendió el cuadro de Pavón muy adelantado y, además, la mala salida de Cristian Arco facilitó que el remate de cabeza de Almenara acabara en el fondo de la red. A tenor de lo que ofrecía el juego resultaba injusto que el marcador cayera de lado local.

La realidad es que el 1-0 dejó un poco 'tocado' al cuadro amarillo porque el Algeciras se hizo fuerte en la posesión. Pero sucedió pasada la media hora lo mismo que con el primer tanto, ya que cuando mejor estaban los locales llegó el golazo de Nieto. El atacante recibió a tres metros del borde del área y soltó un chut brutal que 'explotó' contra las redes de la portería de Javi Jiménez. Un gran gol que hacía justicia a lo que sucedía hasta ese instante.

El oficio del juego en un encuentro tan laborioso se mantuvo hasta el descanso pero las ocasiones brillaron por su ausencia salvo un testarazo de Borja Lázaro que detuvo sin complicaciones el portero del Cádiz B. Con las tablas se acabó una primera parte muy entretenida por la intensidad y que dejó buenas sensaciones en los 'yogurines'.

El escenario que planteó el segundo periodo era el del Cádiz B de nuevo tratando de liderar el encuentro y jugar con la ansiedad de un enemigo que a medida que pasaran los minutos iba a entrar en un estado de nervios superior debido a sus urgencias clasificatorias. Moi intentó meter el dedo en esa herida con un balón que alcanzó de cabeza pero que no encontró el objetivo del gol a pesar de las buenas intenciones.

Salva Ballesta trataba de dar otro giro al choque dando entrada a Antoñito, en busca del balón que en muchos momentos 'escondía' el filial y que provocaba que los locales corrieran más de la cuenta tras el esférico. Precisamente este jugador algecirista rubricó una pérdida que Javi Pérez aprovechó para lanzar seco a la portería de un Javi Jiménez que estaba bien situado para detener.

Tampoco Pavón se conformaba y la apuesta de Hernán Lino y luego Hicham puso de relieve que perseguía el premio gordo aunque el empate no fuera un disgusto desde la valoración de que el Algeciras no sumaba tres al ser, ahora desde la distancia, un enemigo para evitar el descenso.

Antes de que el veterano Santos Pargaña decretara el final del partido, Antoñito tuvo una de cabeza, a centro del incombustible Almenara, que se escapó fuera, así como Barba en un balón colgado por el ex cadista Braganza cuyo tiro raso tampoco acabó entre palos. Pero la mejor fue amarilla en una llegada de Hicham que resolvió poniendo el balón abajo cerca de un poste hasta que la mano milagrosa de Javi Jiménez evitó lo que era el 1-2.

De esta forma se cerraba un derbi de intensidad y enorme esfuerzo por ambos conjuntos que dejó la sensación de que el Cádiz B estuvo más cerca de la victoria por llevar el peso del encuentro a su espalda y por la buena ocasión de Hicham en el tramo final.

Tras esta jornada el filial se coloca con 32 puntos, se mantiene en la zona templada y el próximo domingo (11:30 horas) recibirá en las instalaciones de El Rosal al Córdoba.