Prudencia y humildad, lema del técnico a una semana del debut

La comparecencia de prensa de Alberto Monteagudo tuvo ayer mucho de repetitivo con las dos últimas, pero es que la situación del equipo en cuanto a las sensaciones que deja sobre el terreno de juego sigue siendo la misma. Bien en ataque, mal en defensa. El preparador cadista espera que remonten los problemas en la zaga para encontrar el equilibrio adecuado en el once. Todo ello, a una semana del debut liguero.

El técnico albaceteño explicó ayer que, a pesar de las dificultades en labores defensivas, "cada día el equipo está mejor". Sin embargo, no ocultó su pesar, "no me está gustando que encajemos goles en todos los partidos, pero en esa línea hay mucha que vino tarde y es algo que se nota". La esperanza del preparador pasa por dos nombres, Edison Torres y Raúl Albentosa, que serán los próximos fichajes. "Nos van a ayudar, pero también confío en los que tenemos. Ha costado el comienzo, que es algo que a mí, de jugador, me pasaba en pretemporada", concluyendo con una frase contundente: "La línea de atrás va a ser solvente".

Monteagudo no escondió por enésima vez la realidad del equipo hasta el momento en la pretemporada. "La sensación de todos es que arriba va bien y atrás cuesta. Ayer (en referencia al jueves) tuve una charla con ellos y les dije que no se debe mirar a la defensa, sino ayudar". Del mismo modo explicó los motivos por los que ha probado al central Garretas en el lateral. "Fue una prueba por si vamos a un campo con las dimensiones pequeñas". Del aspecto que no tiene dudas es del físico, que el técnico entiende que "está mejor". "Faltan doce días de pretemporada -por el retraso en el inicio de los entrenamientos- y algunos amistosos más. Pero es lo que hay y debemos aclimatarnos".

No teme al fuerte arranque de temporada con cinco partidos casi seguidos entre la Liga y la Copa del Rey. "Creo que el equipo está preparado para jugar cinco encuentros en dos semanas y que tiene soluciones para esos partidos", agregando seguidamente sobre el estreno liguero que "el duelo contra el Loja lo afronto como si fuera el único partido de Liga". "Ese día es el más importante y no quiero mirar al siguiente de la Copa. El Ramón de Carranza debe pesar a los rivales y eso se logra saliendo a por los partidos. Este equipo (Cádiz) es joven y si empieza bien se puede venir arriba y si no es así habrá que tener paciencia".

Tuvo tiempo para hacer una reflexión en voz alta sobre la exigencia de la nueva campaña para el Cádiz. "Soy prudente. En el fútbol he visto mucho y me ha pasado de todo. Sé donde estoy y lo que buscamos. Tenemos más historia que el Loja, pero la realidad es que estamos en la misma categoría. Debemos ser el equipo más humilde del grupo. El que no sea humilde no tiene hueco aquí. La gente me va a ver según lo que haga el equipo. Presión, no; ilusión, sí. Espero que la gente aplauda más que pite", señaló.

Para acabar, apuntó que con la llegada de Torres y Albentosa "se debería dar por cerrada la plantilla, pero nunca se sabe". "Traer por traer, no, porque subí del filial a Sergio y a otros y dieron un buen resultado".