El mercado de incorporaciones se mueve a paso lento pero empieza a mostrar casos llamativos como el de Rubén Castro. El delantero ha finalizado contrato con el Cartagena, equipo en el que ha sumado 19 goles en 41 encuentros que han ayudado a la permanencia, y aunque tiene una oferta de renovación él no cierra las puertas a la vuelta a Primera División. Es inevitable que se apunte al Cádiz CF como uno de esos posibles destinos.

La realidad es que el ariete, que cumplirá 40 años el próximo día 27 de junio, sigue dando un rendimiento que sorprende a propios y extraños; un caso que guarda similitud con el bético Joaquín. Rubén Castro ha sido una de las patas sólidas del proyecto del Cartagena en el regreso a a categoría de plata y el jugador ha respondido con participación y puntería para ser el único ascendido de Segunda B del año pasado que ha sido capaz de obtener la permanencia (Sabadell, UD Logroñés y Castellón han descendido).

Conjuntos como el Getafe y el Mallorca miran de reojo al veterano atacante, aunque en ese grupo de clubes atentos no está el Cádiz CF, que entiende que no es lo que busca ni lo que quiere Álvaro Cervera para las señas de identidad de los amarillos por su forma de jugar. Hay que tener presente que la delantera cadista ya cuenta con un experto de la talla de Álvaro Negredo, que en agosto cumplirá 36 años.

Desde el Cádiz CF, la línea de actuación para reforzar el ataque apunta hacia otro lugar, un perfil diferente que encaje en lo que precisa el entrenador para una demarcación en la que empieza la eficaz labor defensiva del conjunto gaditano. Es indiscutible la capacidad realizadora que aún ostenta Rubén Castro a pesar de su edad, aunque ese estilo una vez que se trasladara a la exigencia física del cuadro cadista ya tiene una lectura distinta.

Lo seguro es que hay conjuntos de Primera División que quizás contemplen saborear las últimas mieles de un futbolista incombustible de cara al gol que presente cifras del curso recién concluido más propias de cuando contaba con 15 años menos. La esperanza con Rubén Castro es similar a la de un jugador como Jorge Molina (39 años), que en el mejor Granada de la historia, el de la campaña pasada, acumuló 51 encuentros y 15 goles entre Liga, Copa del Rey y Liga Europa.