Almería, una plaza para tomar impulso

Si el Cádiz no es capaz de ganar en Almería, apaga y adiós. Y es que el Almería B tiene el triste honor de ser el quinto peor equipo como local tomando como referencia los cuatro grupos de Segunda División B. Sólo hay cuatro conjuntos -de un total de 79- peores que el filial rojiblanco cuando juega ante sus espectadores. Con esa carta de presentación, el conjunto de Raúl Agné sabe que tiene el cartel de favorito y que está más que obligado a salir airoso del Estadio Juegos del Mediterráneo. La clasificación aprieta si los amarillos quieren terminar dando caza al Guadalajara (cuarto en la tabla) pero, además, los números como local del Almería B no permiten un error como el de El Palo, Algeciras, Sevilla Atlético...

Hay cuatro equipos con registros penosos cuando juegan con el apoyo cercano de sus aficionados. Uno de ellos es el Almería B, al que visita el Cádiz el próximo domingo. El conjunto de Miguel Rivera sólo ha ganado en tres ocasiones jugando como local; sucedió en las jornadas décima (2-1 al San Fernando), 18ª (2-1 al Arroyo) y 28ª (2-0 al Cacereño). Lo demás, para llorar: cuatro empates y siete derrotas.

Pues con estos registros tan malos, hay cuatro conjuntos que son peores en este aspecto. Empezando por el grupo I, encontramos al Noja, que después de 27 encuentros de Liga sólo ha ganado uno como local. Fue en la primera jornada de Liga (2-1 al Sporting de Gijón B). Luego, como local, cinco empates y 12 derrotas. Por ello es colista a 15 puntos de la permanencia, lo que quiere decir que está prácticamente desahuciado.

En el grupo II existen dos casos. Por un lado está el Sariñena, que al igual que el Noja sólo ha ganado en una ocasión en su campo (2-0 al Peña Sport en la 19ª jornada), empatando siete duelos y perdiendo otros siete. Tiene la salvación a 16 puntos, por lo que todo apunta a que la próxima temporada militará en Tercera División. En este mismo grupo está también el caso del Peña Sport, que ha salido victorioso como local en dos ocasiones. Es vicecolista y la permanencia la tiene a 14 puntos, lo que complica una enormidad su continuidad en la división de bronce.

Y en el grupo III nada más que hay un caso, el del Prat. El conjunto catalán sólo ha ganado dos encuentros en su estadio, donde no está fino a pesar de que fue un fortín para lograr el ascenso hace dos años. De ahí a su posición de farolillo rojo, a nueve puntos de la salvación.

El grupo IV presenta al Almería B como el peor de los peores con tres triunfos locales. La escuadra rojiblanca comparte este cartel con el Caudal Deportivo (grupo I) y el Puerta Bonita (grupo II), que también cuentan con tres victorias en casa. Lógicamente el Almería B es el peor del grupo IV cuando juega ante sus aficionados, ya que otros equipos metidos en el fango ofrecen mejores números. Son los casos del Atlético Sanluqueño (cuatro victorias), el Écija Balompié (cuatro), el Córdoba B (cuatro), el Arroyo (seis) o incluso el Sevilla Atlético (seis).

Otros datos que reflejan claramente la situación del segundo conjunto almeriense apunta a los goles marcados como local, once en 14 encuentros. Además se da el caso de que en ese número de partidos sólo en tres ocasiones hizo más de un gol.

Los datos hablan por sí solos y demuestran que Almería es una plaza ideal para que un visitante reaccione y resurja sumando los tres puntos en juego, precisamente lo que necesita lejos del Ramón de Carranza el equipo de Raúl Agné lejos. Las excusas tendrán poca cabida frente a un adversario inferior en plantilla y, sobre todo, experiencia que, además, tiene uno de los cinco peores números como local de toda la Segunda B.