El paro y la vivienda son los dos principales problemas de la ciudad, problemas que han ido empeorando en los últimos años. En el segundo de los casos, el incremento de las viviendas vacías, según las estadísticas oficiales, ha sido espectacular a pesar de la necesidad que hay de pisos sociales en Cádiz.

El recorte en las inversiones en materia de vivienda por parte de las administraciones ha agravado aún más la situación. Los movimientos vecinales del casco antiguo más activos a la hora de luchar contra esta problemática, como la Asociación de Vecinos de Santa María, denunciaron ayer a este diario la "total paralización" de los trabajos de rehabilitación del parque de vivienda que venían realizando tanto el Ayuntamiento como la Junta.

José Rodríguez, presidente de esta entidad, destacó que "además, los recortes en las inversiones públicas también se está notando en los trabajos de mantenimiento que éstas realizaban de forma periódica en las fincas de su propiedad". Teniendo en cuenta que gestionan cientos de pisos a lo largo de todo el casco antiguo, si éstos no se cuidan "acabarán de nuevo en mal estado, por lo que todo el dinero gastado hasta ahora no habrá servido de nada", se constata desde el movimiento vecinal.

Rodríguez lamenta el silencio de la Junta y el Ayuntamiento ante las peticiones de su colectivo para activar nuevos proyectos en intramuros, evidenciando incluso que ya no hay dinero ni para actuaciones puntuales en los espacios comunes de los edificios.

Este periódico solicitó ayer a las dos administración su valoración sobre el estado de rehabilitación del casco antiguo y los posibles planes que pudiesen tener. En el caso de la Junta se excusaron justificando el silencio por problemas de agenda; en cuanto al Ayuntamiento, se remitió por escrito una respuesta que se limitó a informar sobre el estado de las fincas de República Dominicana 11 y Paco Alba 4, protagonistas de una denuncia de la Asociación de Derechos Humanos, como informó este diario en su edición del jueves.

Lo cierto es que la paralización de la rehabilitación del casco por parte del dinero público es evidente. La última obra iniciada, por la Junta, es la del Callejón de Osorio, operación de gran calado por el número de pisos que se construye pero que se planteó hace ya una década, al igual que ha pasado con las últimas promociones entregadas por esta administración, iniciadas también hace muchos años.

Desde la asociación de vecinos de Santa María se está coordinando la elaboración de un censo sobre las fincas que están vacías en intramuros. A finales de este mes tiene previsto José Rodríguez presentar parte de este documento, con datos de barrios como Santa María, Pópulo, Mentidero, La Viña o San Juan. Un documento que es claro ejemplo de la paralización de la rehabilitación del casco. Sólo en La Viña se ha fichado una treintena de fincas en malas condiciones; en Santa María hay 36 y otras ocho en el Pópulo. Lamenta Rodríguez la escasa colaboración que está encontrando en muchas asociaciones de vecinos para cerrar los datos, que incluyen el nombre de la propiedad y el estado del inmueble. Sí destaca que la mayor parte de estos edificios son de propiedad privada. Como ejemplo, en su barrio hay 29 fincas privadas, cinco del Ayuntamiento y dos de la Junta, aunque en otras zonas es mayor el número de inmuebles de la administración regional que están sin rehabilitar.

Un estudio realizado por Diario de Cádiz hace un año cifraba en 102 el número de los inmuebles vacíos en el casco antiguo. En base a los datos ya obtenidos por la asociación, esta cantidad ha aumentado incluso de manera notable, a pesar de que la falta de vivienda en uno de los grandes problemas de Cádiz.