Un traumatólogo entregado a sus pacientes
VII premio Federico Joly
Conocí al doctor José Manuel Pascual en el año 1990, cuando conocedor de vacantes en el cuadro médico de su empresa, solicité un puesto en la misma, en esa reunión donde también estaba presente su hermano Salvador, cirujano general y del Aparato Digestivo, especialidad en la que yo deseaba construir mi carrera profesional, se decidió mi futuro adscrito a dicho empresa y a ese servicio.
Eran años de expansión de la empresa Pascual de dos hospitales, San Rafael y Sta. María del Puerto, se pasó a tener hospitales en, Jerez, Huelva, Sanlúcar, Villamartín, Zafra, Montilla. Eran años de mucho trabajo y de multiplicar esfuerzos, pero debo reconocer que el primero en realizar este trabajo y esfuerzo era el propio José Manuel.
Comprometido con la filosofía que el doctor Pascual Pascual, su padre, quiso para su empresa, continuo manteniendo a sus trabajadores como una gran familia, se exigía esfuerzo pero se escuchaba y atendía las necesidades personales, se anteponía al paciente ante cualquier otro proceso, nunca en mis 33 años de pertenencia a esta empresa se me ha pedido que modifique una actuación terapéutica en función de su coste económico , siempre se me ha permitido utilizar los mejores recursos para el tratamiento de nuestros pacientes, creo , honestamente , que ha sido un empresario ejemplar que ha sabido combinar la licitas ganancias económicas de una empresa con el mejor trato posible a los pacientes que se atendía.
Y todo esto con, el que, para mí, debió ser el mayor sacrificio realizado a nivel personal en todos estos años. A las horas de trabajo robadas a la familia y al descanso personal, con las duras e importantes decisiones que todo empresario debe tomar, ínsito, el mayor sacrificio debió ser abandonar la medicina de primera línea. Conocí a José Manuel, como un traumatólogo entregado a sus pacientes y a sus quirófanos donde mostraba una gran habilidad técnica pero sobre todo una gran humanidad, cualidades que viví en primera persona tanto en él como en su hermano Salvador, heredadas, no me cabe duda, de su padre.
En lo personal debo decir que siempre he tenido el apoyo de José Manuel, en momentos complicados profesionales pero sobres todo personales, me he sentido arropado, me ha hecho transitar por esos momentos de dificultad personal, especialmente cuando mi salud se resintió, con mas seguridad y menos presión.
Hoy tras 33 años siendo trabajador de la empresa Hospitales Pascual, toda mi vida profesional, quiero agradecer el apoyo personal y profesional que he sentido por parte de D. José Manuel Pascual, no me cabe duda, estoy convencido de ello, que el paso de los años nos hará ver con perspectiva la capacidad intelectual, empresarial y la humanidad que atesora este ilustre gaditano al que tanto debe nuestra ciudad y nuestra provincia.
También te puede interesar
Lo último