La sentencia sobre el cura de Salesianos divide al tribunal

Los magistrados de la Sección Tercera no llegan a un acuerdo, de manera que la resolución judicial se adoptará sin unanimidad.

López Luna frente al tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia./Jesús Marín
López Luna frente al tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia./Jesús Marín
Julia Alarcón Cádiz

06 de julio 2016 - 01:00

El tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cádiz encargado de juzgar el caso del cura de Salesianos -acusado de abusos sexuales a menores en el colegio en el que ejercía las funciones de director entre 2011 y 2013- no ha alcanzado un acuerdo a la hora de redactar la sentencia.

Este tribunal, compuesto por tres magistrados, Manuel Grosso de la Herrán (presidente de la Sección), Miguel Ángel Ruiz Lazaga y Ana Rubio Encinas, se ha dividido en su deliberación sobre la resolución judicial que determinará si Francisco Javier López Luna cometió o no los doce delitos de abusos sexuales que en un principio planteó la Fiscalía.

Así, Ana Rubio Encinas, la juez que había sido designada como ponente de la sentencia, es decir, la que debía redactarla y argumentarla, ha defendido una postura diferente a la de sus otros dos compañeros, Manuel Grosso de la Herrán y Miguel Ángel Ruiz Lazaga. Por lo tanto, la sentencia no será dictada por unanimidad, sino que la decisión será adoptada por mayoría de dos votos contra uno.

Al ser precisamente la magistrada ponente la que queda en minoría con su voto en solitario frente al de los otros dos jueces de la Sección Tercera, ha renunciado a redactar el dictamen que condene o absuelva al cura de Salesianos.

Toda vez que la magistrada ha rehusado a elaborar la sentencia sobre el ex director del colegio religioso -lo que se ha hecho saber a las partes a través de una providencia-, ahora se ha nombrado a un nuevo ponente, el juez Miguel Ángel Ruiz Lazaga.

Esta disparidad de criterios no suele ser la norma general en las decisiones que adoptan los tribunales en la Audiencia Provincial de Cádiz. Lo que ha ocurrido en la deliberación de la presente causa es una circunstancia excepcional, si bien el propio sistema judicial lo contempla como opción. No es lo habitual, pero puede suceder, y en el caso del cura de Salesianos así ha sido: el tribunal no ha llegado a un acuerdo.

El relevo en la ponencia de esta resolución judicial implica además otro paso poco corriente en el ámbito jurídico. Y es que una vez que la sentencia esté redactada y razonada, la magistrada que ha mantenido el punto de vista discordante deberá emitir su voto en solitario así como su argumentación para sostenerlo.

El cura de Salesianos. acusado de abusar sexualmente de 27 menores cuando era director del colegio religioso. se enfrenta a una pena de cárcel de 38 años de prisión, si bien la Fiscalía planteó en la última sesión del juicio una significativa rebaja hasta los 15 años de prisión tras proponer una calificación alternativa: 12 delitos contra la integridad moral frente a los 12 delitos de abusos sexuales que había solicitado en su escrito de acusación inicial.

Durante la celebración de la vista Francisco Javier López Luna defendió en todo momento su inocencia aduciendo que él fue "un niño entre los niños", que en Cádiz no habían sabido entender su sistema pedagógico basado en la proximidad y que se rebajó al nivel de los alumnos "especialmente conflictivos" para empatizar con ellos.

Las declaraciones que ofrecieron los chicos implicados se celebraron en el juicio a puerta cerrada, de manera que su versión de los hechos no fue pública. Los padres, por su parte, coincidieron en señalar que desconocían que sus hijos faltaban a clase para acudir al despacho del director, donde, al parecer, se sucedían juegos violentos y de índole sexual.

stats