Para que salgan con tranquilidad

Cruz Roja ha puesto en marcha el servicio "Teleasistencia móvil" , que ofrece la misma cobertura que el ya existente para el interior de los domicilios y que está dirigido igualmente a personas mayores pero en este caso para favorecer que puedan salir de sus casas con la seguridad de que acudirán a ayudarlas ante cualquier eventualidad que les surja en la calle, las 24 horas del día y los 365 días del año, en cualquier lugar.

Inma Tejada, la trabajadora social responsable del proyecto, destaca que se trata de que personas capacitadas físicamente para salir del ámbito domiciliario puedan ir a la calle a realizar cualquier gestión o simplemente de paseo.

"En el supuesto de que le surja cualquier inconveniente o dificultad física o psíquica mientras está en la calle puede utilizar su aparato de telefonía móvil pulsando un botón y conectará directamente con la central de asistencia", señaló.

Por su parte la operadora de la central de asistencia, ubicada en Sevilla, localiza al usuario del servicio, mediante el sistema GPS, disponiendo a la par de su historial médico y personal.

Asimismo, en función del requerimiento, activa los servicios públicos necesarios para atenderle y da aviso a los servicios públicos de atención, además de al familiar cuyos datos haya facilitado el interesado, que figuran en su fichero correspondiente.

El proyecto, financiado por el Ministerio de Sanidad, dispone en Cádiz de 30 plazas, para mayores de 65 años, que pagan desde 5 a 24 euros al mes en función de sus ingresos y es compatible con el de teleasistencia domiciliaria.

Las ventajas del nuevo servicio es que mejora la autonomía personal, posibilita que la persona pueda seguir moviéndose en su entorno habitual, la máxima tranquilidad y seguridad tanto para el usuario como para su familia y la localización y atención permanente.

Francisca Gutiérrez, una de las usuarias del servicio, que fue auxiliar en la sala de la Concepción del antiguo Hospital Mora durante unos 30 años, vive sola, padece una invalidez y una lesión de corazón. Recuerda que un día se sintió indispuesta cuando se encontraba en la calle y el tiempo se le hizo eterno hasta que una joven se acercó a interesarse por su estado y la acompañó al servicio de urgencias del Hospital.

Ahora no se separa del aparato de telefonía móvil de la compañía Vodafone, que no funciona como teléfono, pero que siempre mantiene activo el botón para conectar con la central de asistencia de Cruz Roja, lo que le permite salir a la calle cada vez que le apetece. Contempla además la movilidad geográfica.

Cada usuario dispone también de un voluntario, como es el caso de María del Rosario Pineda, que se compromete a comprobar una vez al mes la terminal del sistema y que actúa como intermediario entre Cruz Roja y el usuario, del que conoce incluso a quien tiene que acudir para acceder a su domicilio en caso necesario y la medicación que recibe .

El sistema es también un complemento a la teleasistencia domiciliaria, se presta mediante un colgante con el que se avisa a la central y se puede llevar siempre colocado, ya que se puede mojar y garantía la cobertura en toda la vivienda.

La "Teleasistencia Móvil", aparte de a personas mayores, sirve para garantizar la seguridad fuera a personas que sufren alguna discapacidad por enfermedades crónicas o mentales o que hayan sufrido un accidente.