En el horizonte de los objetivos del equipo de gobierno está también dotar a la ciudad de un renovado servicio de transporte público, proyecto que aunque no está cumpliendo los ritmos y plazos inicialmente previstos, no se ha dejado de lado. El concejal de Movilidad, Martín Vila, asegura que el Ayuntamiento sigue trabajando en la redacción del nuevo pliego de condiciones que regirá este servicio.

Recuerda el concejal que el principal problema al que se han enfrentado los técnicos en el Ayuntamiento ha sido "que el pliego se hace de la nada", ya que la gestión del servicio de autobuses ha estado siempre en manos de la misma empresa, que desde que firmó el primer convenio ha venido renovando las relaciones sin que se haya producido concurso público alguno. Por tanto, se está haciendo un documento completamente nuevo, que se quiere tener terminado antes de que finalice el actual mandato, en mayo del próximo año -aunque a finales de 2017 se dijo que estaría el pasado mes de enero-.

También se va a procurar una mejor conexión entre las zonas de la ciudad

Avanza Vila cuáles van a ser las principales mejoras que propiciará el nuevo pliego de condiciones. La primera es que una vez que se adjudique el nuevo contrato se quiere renovar la práctica totalidad de la flota de autobuses -que hace más de una década que no se renuevan, sumando media docena de vehículos veinte años en servicio, con una edad media que alcanza los 14,6 años de edad-, buscando además la incorporación de los nuevos motores híbridos o eléctricos, en la medida en que sea posible.

Respecto al servicio, Vila indica que el nuevo pliego permitirá que se puedan ampliar las horas de funcionamiento de las distintas líneas de autobuses, la mejora de las frecuencias con que circulan por la ciudad los vehículos en cada línea y una mejora también de la conectividad entre las distintas zonas de la ciudad. Estas características son demandas ciudadanas que se han repetido en numerosas condiciones, ya que en la actualidad la frecuencia de algunas líneas es bastante limitada (con autobuses cada diez o quince minutos) y sus horarios limitados especialmente en horarios nocturnos; y sí es un déficit importante del servicio urbano la dificultad para trasladarse de determinadas zonas de la ciudad a otras, siendo tarea pendiente desde hace años la transversalidad de alguna línea de autobús que permita conectar el Cádiz de Puntales, La Paz o Astilleros con el del Paseo Marítimo o la Avenida, algo que hoy en día es bastante complejo y requiere necesariamente de transbordos.

En cualquier caso, atendiendo a los últimos plazos indicados por el concejal de Movilidad, se antoja complicado que antes de que finalice 2019 la ciudad vea renovado su servicio de autobuses, que está en estado de prórroga desde el año 2015.