La Ordenanza Municipal de Tenencia de Animales, que se aprobó en el Pleno del pasado mes de julio, ya ha salido publicada en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) y, por lo tanto, ya ha dado inicio desde el 16 de septiembre el plazo de exposición pública de un mes.

La concejala de Salud, Eva Tubío, recuerda que la ordenanza con la que contaba el Ayuntamiento de Cádiz databa del año 2002 "y estaba incompleta y obsoleta en parte de su articulado".

La principal novedad que trae esta nueva ordenanza está en el apartado de la cesión de animales perdidos, entregados o abandonados "para los que se tendrá que alcanzar el sacrificio cero". Tubío asegura que lo que se persigue es que las protectoras encargadas del cuidado de estas animales "limiten el sacrificio a casos extremos de enfermedad y que desde la propia Delegación de Salud y desde las protectoras se promueva la prevención del abandono y la adopción de cualquier otra alternativa de protección". Por ello afirma que lo que se busca como objetivo final es el abandono cero.

Asimismo la ordenanza recoge otras novedades como el título V dedicado a los centros veterinarios y a los centros para la venta, adiestramiento y cuidado temporal de los animales de compañía. En este apartado se establecen las condiciones que deben cumplir dichos centros, así como los requisitos generales y específicos y el mantenimiento y la gestión del Registro Municipal de estos centros. Y también hay un título completo, concretamente el séptimo, que está dedicado a los perros guías para personas con disfunciones visuales.

Uno de los principales problemas que hay en esta ciudad con la limpieza es la de la presencia de excrementos de perros en la vía pública por culpa de los dueños que no la recogen. En el artículo 10.3 se refleja que las personas que lleven a los canes en la calle están obligados a recoger las defecaciones "salvo en aquellas zonas autorizadas por el Ayuntamiento". En este sentido se recomienda que se lleven a los perros a los parques caninos. También dejan claro que está prohibido que estos animales orinen sobre el mobiliario público, especies vegetales o edificios y vehículo entre otros y sólo estará permitido en zonas restringidas y en viario público no restringido, pero para ello los propietarios deben llevar los utensilios para mitigarlas.