"En la operación de la Zona está el futuro de la ciudad". La arquitecta asesora del Plan General de Ordenación Urbana de Cádiz, Teresa Bonilla, tiene muy claro que si no se genera empleo con la remodelación de la Zona Franca "Cádiz no podría mantener el papel que le otorga ser el motor de la zona".

Bonilla participó en la tarde de ayer en un debate organizado por la Comisión de Urbanismo del Colegio Oficial de Arquitectos, donde en compañía de Rafael Marín Gálvez, director de la oficina municipal del PGOU, presentaron todos los pormenores del documento urbanístico. Asimismo, también participó el arquitecto Diego Cano González, autor de un informe sobre el presente PGOU.

Bonilla dijo que este plan era "más de adaptación que de revisión, al igual que lo fue el del año 95 con el que se hizo en 1984". Esto ha sido debido por dos motivos fundamentales: por un lado, la falta de suelo que sufre la ciudad y, por otro, porque "ha sido hecho por funcionarios del Ayuntamiento con apoyo exterior", por lo que "el continuismo ha sido un elemento clave".

Eso sí, Bonilla se refirió ayer a una diferencia, y es que mientras que en los anteriores documentos se planteaba el casco histórico como un problema "ahora lo obviamos, porque en los últimos 20 años, gracias a la rehabilitación, ya no ofrece una zona que se pueda considerar gueto o chabolismo vertical".

Teresa Bonilla se detuvo bastante en la importancia que tenía unir transversalmente la ciudad desde el frente marítimo de la Bahía al del mar abierto. Esta se va a hacer a través de la avenida que conectará Varela con la avenida de la Bahía "pero debe hacerse en aquellos sitios donde sea posible". La arquitecta dijo que esperaba que el Centro Metropolitano de la Bahía, lo que siempre se ha llamado multiusos, que iría en el lugar de Navalips, "se convierta en una sala de rock antes que en un lugar donde se asesinen toros".

Asimismo, también esbozó las líneas maestras del aprovechamiento del Parque Natural "porque es el 45% de la extensión del término municipal. Debería ser como la Casa de Campo en Madrid" y añadió que la explotación del Parque "estaba ya en el anterior plan, pero de aquella manera".

Uno de los temas que más suscitó debate entre los presentes fue la construcción de las viviendas sobre palafitos a la entrada de la ciudad. Rafael Garófano, ex concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Cádiz, dijo que el plan buscaba el desafío con otras administraciones, como en esta actuación y en la de la demolición de varios edificios en el entorno de las Puertas de Tierra. Bonilla asegura que hay que dignificar la zona y añade que "las viviendas pueden ayudar a ello". De hecho, añadió que "las edificaciones son la mejor manera de tapar los depósitos de agua".