El debate sobre la manera de portar los pasos en la ciudad se ha centrado hasta ahora en la defensa de la carga a hombro o la apuesta por la implantación de costaleros. Pero ahora se suma una nueva opción, la que viene manejando el cofrade José Manuel Pardo desde hace algunos años: portar el paso con dos palos. Es decir, los cargadores se dispondrían como hasta ahora (es decir, divididos en cuatro calles en el interior de cada paso) pero cargando con los dos hombros en lugar de uno solo.

Pardo, amplio conocedor del mundo de la carga y cofrade vinculado a La Palma, probó este estilo en Granada y su intención ahora es importarlo a Cádiz. "Tenía amistad con el capataz de la Flagelación de Granada, y allí lo probé. Esa cofradía viene del Albaicín y por las dificultades y desniveles del suelo no puede llevar los pasos a costal", explica José Manuel sobre el inicio de la propuesta que quiere trasladar a la ciudad.

Según él, muchas ventajas son las que aportaría este sistema de carga. Muchas más, incluso, que las de la manera de portar los pasos actualmente en Cádiz y que la de los costaleros. El primer beneficio que destaca José Manuel es el de la reducción de personas debajo del paso. En este sentido, comenta que si actualmente bajo el Crucificado de la Misericordia hay el Lunes Santo "catorce o quince hombres por palo" (unos 60 cargadores debajo del paso), con la implantación de los dos palos se reduciría a nueve hombres en cada calle (36 en total).

Por esto mismo, precisamente, es más fácil que el paso ande sin tanto mecido y también que lo haga con una zancada más amplia, "ya que el cargador no tropieza con el que está delante porque hay mucha menos gente debajo".

Otro beneficio que resalta Pardo es el de los relevos. En esta cuestión se reducen bastante los problemas "ya que al cargar con los dos hombros lo mismo da que sea derecho que izquierdo", explica. Así, a la hora de configurar una cuadrilla el capataz sólo tendría que preocuparse de la altura de los cargadores, y no del hombro con el que carga cada uno (como actualmente).

A ello se une una mejora en las levantás del paso. Sobre esto, José Manuel asegura que con el sistema que él propone para Cádiz "todas las levantás serían por igual", ya que los hombros no se separarían de los dos palos en ningún momento (ahora los pasos se levantan con los brazos).

Además, Pardo apunta a otras dos premisas que favorecerían la entrada de esta forma de portar los pasos. La primera de ellas se que, según él, "de aquí a cuatro o cinco años no va a haber cargadores, porque de hecho ya se ve que debajo de los pasos siempre van los mismos. Y la segunda es que en Cádiz "todavía no se baila una marcha o se anda un paso como es debido".

"Todos son ventajas. Es más cómodo que la carga de Cádiz e incluso que la de Sevilla, porque aquí se ve afectado un riñón y en Sevilla la cerviz; pero con los dos palos se trabajarían los dos riñones, por lo que también se puede soportar más peso con menos esfuerzo", afirma José Manuel Pardo al respecto.

Este planteamiento ya lo ha expuesto este cofrade en varias cofradías. Según comenta, la primera vez que lo intentó llevar a cabo fue "hace un par de años" en su cofradía de La Palma. Concretamente, la intención de Pardo era hacer una prueba de esta técnica en el paso de la Virgen de la Palma para demostrar su efectividad. "Pero era la recta final de Francis Lucero como hermano mayor y no se hizo". A raíz de eso, las cofradías de Descendimiento y de Borriquita también han tenido opción de conocer el proyecto que defiende José Manuel, aunque ninguna de las dos lo ha puesto en marcha de cara a esta Semana Santa.

No obstante, José Manuel Pardo sigue trabajando en su proyecto. Ya tiene elaboradas todas las medidas y estudios al respecto, y está formando a un grupo de cargadores que han mostrado interés en ser los pioneros -el día de mañana- en portar un paso con palos sobre los dos hombros si lo requiere alguna hermandad. De hecho, Pardo asegura que hay "un par de capataces que ya me han trasladado su interés por probarlo"; "otros no, claro, otros no quieren perder la manera actual de llevar los pasos".

Habrá que ver si en un futuro este sistema de carga tuviera opciones de implantarse en alguna de las hermandades de Cádiz, como pretende José Manuel Pardo, quien contempla en los dos palos sobre el hombro una forma de portar los pasos que mejora la tradicional.