El dragado del río Guadalquivir para mejorar el acceso al puerto de Sevilla tendrá que esperar, al menos, hasta que no mejore la calidad del estuario del río. Así lo dijo el propio consejero de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, José Fiscal, en un Foro Joly celebrado en Huelva en días pasados,

Este hecho le pone más complicado a Sevilla el hacerse con escalas de cruceros ahora impensables para los gestores del puerto hispalense. De momento, los sevillanos tienen que conformarse con el amarres de buques turísticos de no más de 200 metros de eslora, puesto que naves de mayor calado, eslora y manga lo tendrían muy complicado si quieren navegar sin peligro a lo largo del curso del Guadalquivir.

Desde la APBC siempre se ha defendido que Sevilla no constituye un puerto que le haga mucha sangre al muelle gaditano, sobre todo porque el hecho de navegar por un río cuyas mareas imponen largas estancias en Sevilla echa para atrás a muchas navieras que contemplan en sus catálogos de cruceros al puerto de Cádiz o al de Huelva como los puertos de Sevilla. La hora y cuarto que tardan en llegar los autobuses de turistas desde Cádiz a Sevilla no les merece la pena pasar el peligro del encallamiento.