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El cuidado del patrimonio es una de las asignaturas pendientes de Cádiz. Es una responsabilidad de todas las administraciones, y de los privados propietarios de referentes de nuestra cultura, el mantener de la forma adecuada referentes de la historia de Cádiz. Por el contrario, la falta de mantenimiento de muchas de ellas pone en riesgo su continuidad o, en todo caso, dispara la inversión que será necesaria para su recuperación.
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Edificios históricos de Cádiz que ya no existen ¿Sabes dónde estaban?
Bajo la que era la residencia del obispo de la Diócesis de Cádiz, en un gran inmueble ubicado en la plaza de Fray Félix a a pie de las dos catedrales de la ciudad, se localizaron en su subsuelo importantes restos arqueológicos. En un reducido espacio se pueden ver restos fenicios, romanos, y ya hasta el siglo XVIII. El complejo está cerrado desde hace ocho años en un claro ejemplo de desidia pública y privada pues en su día se adjudicó la gestión del recinto a una empresa con la que el Ayuntamiento entró en un largo litigio. A pesar de su relevancia, el complejo está cada vez en peor estado, incluyo la zona exterior bajo el paseo de Entrecatedrales. No hay fecha por parte municipal para su reapertura.
Hace unos meses se desplomó la gran espada de la figura central del que es el principal monumento de la ciudad. En 2012, con motivo del bicentenario de la Constitución de 1812, se hizo una limpieza de todo el conjunto, pero quedó pendiente una restauración en profundidad, pues con el paso del tiempo y el desgaste provocado por los cambios de temperatura, algunas imágenes se han ido desgastando. El Ayuntamiento dice que no tiene fondos para acometer una obra de esta envergadura, aunque la Junta se ha ofrecido a dialogar sobre cómo ejecutar un proyecto que, hoy por hoy, aún no existe.
Buena parte del recinto de las fortificaciones de la ciudad o están en mal estado o se encuentran desaprovechadas para el fomento de la cultura, el ocio y la historia de la ciudad. El ejemplo más escandaloso, por su magnitud, es el abandono del castillo de San Sebastián. Lleva cerrado desde 2015, sin ninguna obra de mantenimiento aunque hay zonas cuya estabilidad peligra. Propiedad del Estado, ya ha dejado claro que no piensa invertir ni un euro. No es el único recinto en mal estado. Otro ejemplo es el Arco del Blanco. Aunque se restauró hace ya años, no tiene un mantenimiento adecuado y tanto la escalera de acceso a lo que era la capilla de la familia de los Blanco como el pequeño foso acumulan siempre mucha basura.
La recuperación del patrimonio histórico de la Iglesia de Cádiz ha dado un importante impulso en los últimos años. Hay templos que se mantienen gracias a la labor de quienes están al frente de ellos, como pasa con los dominicos. En otros casos, el abandono pone en riesgo su futuro. La Junta salvó de la ruina al histórico Oratorio de San Felipe, tras una inversión de 7 millones de euros. La iglesia de la Pastora lleva cerrada desde 2014, pendiente de diversas obras.
Hace cerca de dos décadas se descubrió en el interior del antiguo Hospital de San Juan de Dios, entonces en obras, los restos de una de las torres de la muralla medieval de la ciudad. Con unos 8 metros de altura, era el único ejemplo de estas torres. Tan importante descubrimiento sigue oculto para la ciudadanía y tampoco se aprovecha como elemento turístico, desconociéndose así su estado de mantenimiento.
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