Pocas fechas después de haber sido elegido pontífice en marzo de 2013, Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco, ya estaba representado en uno de los cirios de la candelería del palio de Nuestra Señora de la Soledad, de la cofradía de la Vera-Cruz. Dos años antes la hermandad había recordado la beatificación de Juan Pablo II o a la Virgen de Chestokova, por la que Karol Józef Wojtyla sentía especial devoción. De esta manera, y desde 1998, la corporación franciscana ilustra los llamados cirios votivos acordándose en cada ocasión de una efeméride o de algún hecho especial. La idea de uno de los ilustres de Vera-Cruz, Juan Manuel Marrero, actual vicehermano mayor, de decorar en el año 98 los cirios que acompañaban al banderín franciscano y a la reliquia del Lignum Crucis cuajó y evolucionó hasta llegar en el año 2000 a la candelería del paso de palio de Nuestra Señora de la Soledad. Actualmente, tanto en las 'marías', así llamados los seis cirios más próximos a la Virgen, como en la cera de la primera tanda de este paso y en los ciriales que anteceden a ambos pasos y los que acompañan a la cruz parroquial, pueden contemplarse estos cirios votivos, elegidos y coordinados por el propio Marrero, su hijo Chico, secretario de la junta de gobierno, y el grupo de mayordomía. Desde el año 2004 el autor de las ilustraciones es José María García Gallardo, hermano de Vera-Cruz. Hasta 2003 la responsable de pintarlas era Rosario Casas, también hermana de la cofradía.

"Nuestra ilusión es pintar un año toda la candelería del palio, pero la cera nos llega muy a lo justo para poder ilustrarla en su totalidad", señala Chico Marrero. De momento este año habrá que estar pendientes a muchos cirios. El primer grupo de tres 'marías' se dedica al 750 aniversario de la Diócesis de Cádiz. Así se representará a Alfonso X 'El Sabio',que recogiendo el testigo de su Padre Fernando III 'El Santo' en la reconquista de Andalucía a los musulmanes restauró el cristianismo en lo que hoy es la provincia de Cádiz; el obispo Fray Juan Martínez, franciscano y primer prelado en el elenco de los obispos gaditanos que ocupó la sede entre 1266 y 1278; y la Virgen del Rosario, en el 150 Aniversario, este 2017, de su Patronazgo de la ciudad de Cádiz.

En el otro grupo restante de 'marías' se representará a San Agustín, por el 400 aniversario de la llegada de la Orden a Cádiz, y a dos dolorosas que cumplen efemérides de su talla y bendición, en ambos casos el 50 aniversario: María Santísima de la Trinidad, de la cofradía de Medinaceli, y Nuestra Señora de la Amargura, de la de Humildad y Paciencia.

Igualmente, en seis de los cirios de la primera tanda de la candelería figurarán pintados los logos de otras cofradías inmersas en diferentes celebraciones. Vera-Cruz se acuerda cada año de las corporaciones que están de efemérides. Esta vez, el de los 425 años de la cofradía de la Soledad y Santo Entierro, el del 350 aniversario de la de Nuestro Padre Jesús del Ecce-Homo y el del 75 aniversario de la fundación de la de Nuestro Padre Jesús Caído. A estos tres, se sumará un cirio pintado por los cristianos perseguidos y necesitados, que llevará el logo de Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN). Precisamente, ACN ha pedido, y así se hará, que el cirio votivo se encienda en la noche del Viernes de Dolores durante la misa de Vera-Cruz preparatoria de la salida procesional y se rece una oración por los cristianos. Asimismo, en dos de ellos figurarán en una pequeña orla los nombres de fray Ramón Estíbaliz y fray José Luis Salido, ambos directores espirituales de la hermandad fallecidos recientemente.

En cuanto a los ciriales, los del paso del Cristo llevarán pintados diferentes instrumentos de la Pasión de Nuestro Señor. Los que anteceden al paso de Nuestra Señora de la Soledad, algunas alabanzas de la Letanía Lauretana, siendo éstas la Casa de Oro, Rosa Mística, Puerta del Cielo y la Estrella de la Mañana. Los que acompañan a la cruz parroquial se ilustrarán con el Escudo de la Orden Franciscana y el de la parroquia del Rosario.

La hermandad toma estos cirios votivos como estrenos anuales del Lunes Santo y tiene archivadas todas las dedicatorias que ha ido acumulando, hecho que no sorprende en una cofradía que cuida al máximo todos los detalles.