Un desgraciado suceso ocurrió anoche en la antigua tienda de vinos El Beaterio, en la esquina de las calles Valverde y San Pedro. El sereno, a las cinco de la mañana, procedió como de costumbre a despertar a la dependencia. Nadie contestaba por lo que avisó a los guardias municipales y al servicio de vigilancia.

Se violentaron las puertas y se notó la presencia de gases asfixiantes. Detrás del mostrador, lugar que tenían destinado a dormitorio, apareció un cuadro imponente. El encargado se encontraba muerto por asfixia y el dependiente apenas presentaba señales de vida. Pese a que se le auxilio rápidamente, falleció al poco rato.

La causa parece radicar que al acostarse dejaron encendida la cocina en la que usaban carbón de piedra y los gases, al estar todo cerrado, produjo la asfixia.

La mayor parte de la colonia montañesa pasó ayer por el local de la desgracia para manifestar su pesar a familiares y amistades.