Un gaditano obtiene el Premio Curso Académico de la UNED

El gaditano Manuel Ángel Gómez Valenzuela ha sido galardonado con el Premio Curso Académico 2013-14 de la Facultad de Derecho de la UNED, que concede su Consejo Social para reconocer la excelencia de sus alumnos y un expediente impoluto. Gómez Valenzuela, con 23 años, ha conseguido este galardón en su último año en el grado universitario de Derecho.

Gómez Valenzuela está en la actualidad preparándose para presentarse a las oposiciones a judicatura. Reconoce que esta noticia es "una dosis de moral muy importante" para la carrera de fondo que le supone llegar a ser juez. Sin embargo, a pesar de la alegría, es consciente de que el premio "no deja de ser algo accesorio" por el camino que le queda por recorrer y la formación que ha obtenido. De hecho, asegura que lo más importante es "el capital humano y el capital jurídico que he obtenido en la carrera".

La opción de realizar los estudios universitarios bajo la fórmula semipresencial no suele ser la más elegida por los alumnos, sobre todo por la diferencia que supone en las relaciones en el aula y lo que significa la vida de estudiante. Sin embargo, Gómez realizó esta elección con la vista puesta en su futuro, ahora presente, como opositor. "Entré en la carrera pensando en opositar a la judicatura. Quería que la carrera fuera el preámbulo de mi desarrollo profesional. Me matriculé en la UNED a sabiendas de que la formación que iba a obtener iba a ser notable", relata. A esto, añade que, a diferencia de la formación presencial, "hemos visto todo el temario de las asignaturas sin que exista ningún tipo de reducción del temario".

Valora de su experiencia en la UNED que "el estudio ha sido totalmente autónomo", lo que le ha servido para adquirir la rutina para seguir su preparación como opositor. "En la carrera echaba las mismas horas que estoy echando ahora mismo. Estoy 12 horas diarias estudiando con la metodología que seguía. Me levanto a las seis y media de la mañana y estoy estudiando hasta las nueve de la noche. Eso no ha variado ni un ápice durante los cuatro años del grado. La diferencia está en el estudio memorístico y la literalidad de los códigos, pero la metodología es la misma", explica.

Con un temario compuesto por 322 temas, Gómez señala que le gustaría dedicarse al Derecho Penal, por lo que le gustaría obtener una plaza en un Juzgado de Instrucción o en una sala de lo Penal. "Un juez de lo Penal tiene que decidir sobre la responsabilidad del justiciable. Es un acicate de cara a la motivación que uno puede tener en hacer bien su trabajo", argumenta.

De cara a la oposición, en la mente ya tiene la fecha de abril de 2016, en la que probablemente se realizarán las pruebas para un centenar de plazas. Comenta que el momento del examen se convierte en "un acto de fe, ya que, a pesar de que a priori no te acuerdes, cuando el tribunal saque la bola con el tema allí en el Tribunal Supremo, se te tiene que venir a la cabeza y tienes que tener la valentía de exponerlo".

Aunque todavía queda tiempo para ver los frutos -apunta que la media para sacar esta oposición está en los cuatro años y siete meses de estudio-, sentencia que todo el tiempo dedicado "me compensa y nunca he pensado que sea un error. Hay que tener en cuenta que, independientemente de que saque o no la plaza, voy a adquirir un capital jurídico que voy a desarrollar en otras facetas del sector público, si es que me decanto por otra oposición, y en el sector privado".

Con todo, y a la espera de que llegue el examen, todo no es estudio en la vida de Manuel Ángel Gómez. Sus pocos ratos libres los dedica a salir a correr por la noche. El domingo, por su parte, es su día de descanso. "Me libera mentalmente", incide, aunque es sincero al admitir que "a veces no lo respeto, pero trato de aislarme".