La empresa Erri-Berri tiene previsto empezar a derribar el edificio de Subdelegación a finales de esta misma semana. Los trabajos ya se han iniciado formalmente con la firma, ayer, del acta de replanteo, y durante estos días se despejarán los edificios afectados: el antiguo Gobierno Civil y el pabellón anexo.

Según explica el jefe de obra, Jaime Arriazu, hoy llegará una góndola de unos veinte metros, procedente de Almería, que traerá hasta la zona el resto de la maquinaria. En la demolición trabajarán siete personas y dos grandes retroexcavadoras, con brazos de hasta 24 metros, indica el arquitecto Miguel Revuelta.

Una de estas máquinas empezará a trabajar en el solar de Radio Juventud, en la esquina con el inmueble situada más cercana a la Avenida, y continuará hacia la fachada lateral, para acometer por último la parte delantera del inmueble. La otra excavadora se situará en la esquina del pabellón de autoridades y avanzará en el mismo sentido, hasta llegar al solar para trabajar en la parte posterior del inmueble.

La demolición se irá haciendo de arriba hacia abajo, de forma escalonada, y no se espera que el edificio, que ayer visitó el equipo técnico y representantes de Subdelegación (entre ellos el secretario general, Francisco Calero) y Hacienda (estuvo Anastasio Tirado, delegado de Hacienda), revista mayores problemas, sobre todo por la existencia de un solar que facilitará mucho las cosas.

La demolición durará una semana, y después vendrán las labores de retirada de escombros. Los camiones entrarán por el solar y saldrán por la parte delantera para incorporarse al tráfico rodado, que no sufrirá interrupciones -al menos, no se consideran necesarias de momento- debido a esta actuación. Sí quedará anulada, a partir de hoy, la zona de aparcamiento situada frente a la Subdelegación del Gobierno, un espacio necesario para que maniobre la maquinaria.

La comitiva recorrió ayer un edificio fantasma que pronto pasará a la historia. Un calendario de pared, en una de las salas de la primera planta, congeló el tiempo en noviembre, cuando salieron de allí los funcionarios para trasladarse hasta el cercano Banco de España, lugar que servirá de realojo hasta que esté construido el complejo administrativo que ocupará el solar que deje el antiguo Gobierno Civil y Radio Juventud y que aglutinará a todas las dependencias del Estado, probablemente en tres edificios.

Pero antes de que este complejo se construya hay que dar varios pasos: el proceso de demolición se alargará siete semanas a contar desde ayer, y dejará el terreno despejado (salvo los árboles, que se quieren respetar siempre que no estorben la acción de las máquinas) para que empiecen la excavación arqueológica, que determinará si existen restos.

Una vez que se conozca este dato podrá redactarse el proyecto, algo que no se quería hacer con anterioridad ante la posibilidad de que hallazgos arqueológicos obligaran a modificar uno ya redactado, como ha ocurrido ya en otras actuaciones como la de Jabonería. Hasta que no esté listo ese proyecto no se conocerá la forma definitiva que tendrá el complejo, que se espera tener listo para el año 2010.

Francisco Calero explicó que ya se está redactando el proyecto para una pequeña actuación paralela, la de adaptación del local en el 15 de la cercana calle Acacias para trasladar allí la Oficina de Extranjeros.