Las bóvedas de Santa Elena vuelven a estar repletas de personas sin hogar después de que en el pasado mes de marzo el Ayuntamiento de Cádiz anunciara que había encontrado una solución habitacional a 18 sin techo que pernoctaban en ese lugar.

Cabe recordar que en las bóvedas de Santa Elena surgió un movimiento de protesta de las propias personas sin hogar a través de la asociación Somos Cádiz, para lo cual llegaron a poner varias pancartas en las distintas bóvedas.

A pesar de que muchos de ellos había salido en los últimos meses, la zona ha vuelto a ir ocupándose de manera paulatina. Desde la propia asociación Somos Cádiz se cifra en 17 el número de personas que pernoctan en estas bóvedas de Santa Elena.

Desde esta misma entidad se asegura que a las personas sin hogar se les ha avisado que en los próximos días se va a proceder al desalojo de las personas sin hogar que se encuentran allí. El Ayuntamiento tiene en proyecto proteger estas bóvedas, que es un Bien de Interés Cultural, tal y como está la Casa del Niño Jesús, de manera que a partir de ese momento no va a poder pernoctar nadie en las mismas ante la imposibilidad de acceder a los arcos.

Muchas de estas personas acuden a diario a los servicios municipales para los sin techo que se encuentran en el centro Fermín Salvochea en el Campo del Sur, así como han ido recibiendo la visita semanal de los equipos de calle del Ayuntamiento.

Otro de los focos de concentración de estas personas se encuentra a la trasera de las bóvedas de Santa Elena, es decir, en el foso del Pelícano. Allí el problema es que algunas de las personas que se encontraban allí han abandonado el lugar pero desde hace días permanecen muchos de los enseres y pertenencias que tenían esparcidas por numerosos metros. Así, se pueden ver mantas, ropas y hasta sillas de mimbre destrozadas.

Mención aparte son las bolsas de basura que hay acumuladas en una esquina y que parece que han sido tiradas desde arriba por alguna persona poco cívica.