Javier Cruz y Arancha Rider son otros dos valientes de la hostelería que están sacando adelante su bar lo mejor que pueden en las peores condiciones posibles. Con el mismo cariño y con la misma alta calidad de siempre, tanto en cocina como en servicio.

Antes de la pandemia, la barra del recogidito local de Vinos y Tapas Sur en Fernández Ballesteros resultaba prácticamente inaccesible, a no ser que estuvieses dispuesto a esperar un poco. “Después de un verano muy bueno, estamos trabajando al 50%, y sin terraza. Son tiempos muy difíciles. Estamos muy agotados, al límite, pero vamos a aguantar este tirón”, dice Javier animoso.

En algún momento pensaron pedir permiso para una terraza, pero con la acera estrecha, el carril bici y una zona de carga y descarga que tienen delante desde Horeca se lo desaconsejaron. Mantienen en erte a la mitad de una plantilla de tres trabajadores, pero siguen abreindo todos los días de la semana, salvo el lunes y las noches de los domingos. “Dando cariño, ahora sólo a un 50%”.