Turismo Cuánto cuesta el alquiler vacacional en los municipios costeros de Cádiz para este verano de 2024

equipamientos Proyectos pendientes

El aparcamiento bajo la carretera industrial se quiere construir ya

  • Emasa negocia con una empresa la construcción de la primera fase del subterráneo de Plaza de Sevilla, que iría por debajo de la avenida · En último caso, se haría en solitario antes de que termine el Puente

El aparcamiento subterráneo de la Plaza de Sevilla ya no aguanta más retrasos. El Ayuntamiento quiere construir la primera fase de este nuevo equipamiento antes de que se inaugure el Segundo Puente, para lo cual los plazos -al menos conforme a lo previsto, salvo que se produzcan nuevos retrasos o paralizaciones en la construcción de este puente sobre la Bahía- son cada vez más ajustados. Esto es vital porque se entiende que cerrar esta vía al tráfico una vez abierto el puente sería un mazazo para la circulación de acceso y de salida de la ciudad.

La empresa municipal de aparcamientos, Emasa, está negociando actualmente con una entidad bancaria la posibilidad de realizar conjuntamente estas obras. Y ya se avisa de que en el caso de no fructificar estas negociaciones, será Emasa la que asuma en solitario este proyecto.

La primera fase del nuevo aparcamiento afecta únicamente a la carretera industrial, ya que el estacionamiento se situará bajo la avenida (aunque también coma parte de los terrenos anexos a la estación de tren). Para ello, la empresa municipal ya ha localizado un sistema de construcción que aseguran será más fácil y que evitaría que la carretera industrial estuviera durante tantos meses cerrada completamente al tráfico. El método se conoce como excavación en mina. Y a groso modo, según explican desde Emasa, consiste en construir primero los muros de pantalla, levantar posteriormente la carretera para rebajar el suelo unos 50 centímetros, habilitar la estructura de hormigón que hará las veces de forjado del aparcamiento y del suelo que pisará el tráfico rodado y finalizar con el nuevo asfaltado de la vía. Este sistema permitiría recortar bastante las incidencias de la obra sobre el tráfico de la ciudad, suponiendo que se necesitarían tres o cuatro meses para acometer estos trabajos.

Una vez reasfaltado el terreno, los vehículos podrían volver a transitar con total normalidad por la carretera industrial. Y sería entonces cuando podría iniciarse el vaciado bajo la carretera para la construcción del aparcamiento, sin que repercuta en el tráfico exterior. Asimismo, se permitiría que mientras se esté trabajando en la construcción del aparcamiento se pudiera ir también urbanizando la avenida conforme al nuevo diseño que se quiere aplicar.

El resultado de esta primera fase sería un aparcamiento de 375 plazas de rotación y otras 75 para venta en régimen de concesión, que se entiende vendrá a aliviar las necesidades de aparcamiento de una amplia zona de la ciudad (como puede ser el barrio de Astilleros, de Bahía Blanca o de Santa María) además de facilitar la llegada en coche hasta el mismo centro de la ciudad, ya que una de las salidas peatonales del subterráneo se situaría prácticamente en la Plaza de Sevilla.

De forma más relajada se contempla la construcción de la segunda fase de este aparcamiento, que vendrá a realizarse bajo los actuales edificios de la Ciudad del Mar y la Comandancia de Marina. A este respecto, fuentes municipales señalan que al estar más cerca del centro histórico y en plena vorágine de estaciones y servicios de transporte (tren, catamarán, puerto, futura estación de autobuses...) son numerosas las empresas interesadas en la construcción. Un amplio listado de pretendientes que no se da en el caso de la primera fase.

Básicamente, estas fuentes señalan que la segunda fase consistiría en el derribo de esos dos edificios, el vaciado de los terrenos y la construcción del aparcamiento, sin que apenas tenga incidencia sobre el tráfico rodado. Además, el Ayuntamiento ya plantea volver a recurrir a un posible by pass por el interior de los terrenos portuarios en caso de que fuera necesario.

La segunda fase aportará un nuevo estacionamiento subterráneo en la ciudad con capacidad para más de quinientos vehículos. Y aunque ambas fases queden claramente diferenciadas en la forma, en el tiempo, y en los participantes de la operación, el aparcamiento será único, quedando conectadas entre sí ambas fases. Quiere esto decir que en la zona resultará finalmente un estacionamiento de dos plantas para más de novecientas plazas, asemejándose a la operación realizada recientemente en Santa Bárbara.

Para todo esto, el Ayuntamiento ya ha finalizado el registro de la parcela en la que se construirá el subterráneo, cuya concesión ya posee también la empresa municipal. Y al mismo tiempo, insiste en reclamar el desalojo definitivo y la cesión tanto de la Comandancia de Marina como de la Ciudad del Mar para poder iniciar el proceso de derribo que afectaría a la segunda fase de un proyecto que desde el Ayuntamiento se entiende vital para absorber buena parte del tráfico que llegue a Cádiz procedente del Segundo Puente y que complementaria la ampliación del subterráneo de Canalejas que se ejecutó recientemente.

Además, de esta forma se eliminaría también el actual estacionamiento de la Cuesta de las Calesas, lo que supondría una transformación importante de todo el entorno de la Plaza de Sevilla, que podría considerarse el hall del casco histórico de la ciudad.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios