24-m. elecciones municipales

Cuatro años y dos días después

  • Montoro llegó en la campaña de 2011 para apoyar el cambio en el polígono exterior de ZF. Desde entonces se han dado algunos pasos pero el objetivo final sigue muy lejos. Esta actuación supone el 70% de todo lo que se contempla en el Plan General

CUATRO años y dos días se cumplen hoy desde que el entonces coordinador nacional de Economía del Partido Popular y hoy ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, diera una rueda de prensa al lado de la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, junto a Talleres Faro para escenificar una de las propuestas estrella de aquellas municipales, el proyecto de reordenación del polígono exterior de la Zona Franca y, sobre todo, el respaldo del Gobierno central al mismo si ganaban las elecciones generales que finalmente se celebraron en el mes de noviembre.

 

Si hay algo que tiene peso en el actual Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), es esta actuación urbanística ya que implica un 70% del total del documento que está vigente.

 

Montoro se comprometió a llevar a cabo un plan específico de reindustrialización para esta operación urbanística. Para ello se habló de una inversión total de 600 millones de euros que tenían que salir de las arcas de la Zona Franca, el Ayuntamiento, con las plusvalías de operación y la cofinanciación del Gobierno de la nación y la Unión Europea. Gracias a ella se podría duplicar el número de empleos existentes en la zona hasta llegar a los 5.000.

 

Lo que hay ahora, salvo contadas excepciones, es un polígono industrial con un alto predominio de chabolismo industrial, con prácticamente la mitad de las naves vacías y que dista mucho de los años de esplendor con el que nació esta zona en los años 50 al amparo de una potente industria naval en Cádiz.

 

Cuatro años y dos días después de aquella visita de Montoro se ha recorrido algo de camino pero la distancia que aún queda para llegar a la meta es enorme. 

La transformación es una operación muy complicada y para ello la Zona Franca y el Ayuntamiento de Cádiz crearon una oficina para trabajar en este proyecto con funcionarios de las dos administraciones y que recibe el nombre de Opex.

 

Para empezar la Zona Franca creó un edificio, el Europa, con unas cuantas naves con el objetivo de ir realojando a aquellas empresas con las que se llegara a un acuerdo para poder actuar en esos lugares.

 

El delegado del Estado en la Zona Franca de Cádiz, Jorge Ramos, siempre ha defendido que la inversión privada es la que tiene que jugar un papel fundamental en el desarrollo de esta operación urbanística. Sin embargo se entiende que lo público tiene que ser el que abra el camino. Cuando empiece a verse el cambio se considera que empezarán a animarse los privados.

 

Para conseguir este objetivo la Zona Franca, de la mano del Ayuntamiento de Cádiz, ha centrado todos sus esfuerzos en tres unidades de ejecución. En cada una de ellas ha tratado de ir haciéndose con la mayoría de las propiedades para tener un mayor peso en las tomas de decisiones y en las actuaciones respectivas.

 

La primera de ellas y la que se encuentra más avanzada es la de Ibérica AGA, donde incluso ya se ha pedido la licencia de demolición de las edificaciones que no están protegidas. Esos terrenos van a estar dedicados a la instalación de pequeñas empresas y se va a abrir un viario que va a conectar las dos principales vías del polígono exterior, las de Algeciras y Gibraltar.

 

La transformación del polígono exterior, cuando se haga, plantea una actuación a fondo en la reurbanización de todos los viarios para que tengan un aspecto más moderno y acorde a lo que se plantea aquí.

 

Otro de los puntos de mira de la Zona Franca se tiene puesto en la manzana formada por el antiguo Hiper Cádiz, Talleres Faro y otras naves contiguas. Aquí la Zona Franca tiene la propiedad de una parte, pero la otra todavía es privada. El planeamiento tiene previsto crear un centro comercial con un diseño moderno con una torre que estaría destinada a oficinas y a un hotel. Esto serviría como fachada de entrada a todo el polígono.

 

La tercera es la de Navalips, una unidad de ejecución que viene marcada por el centro metropolitano de espectáculos, con una fórmula de construcción parecida a la del Carranza pero que habrá que replantear debido a la experiencia de la tribuna del estadio.

 

La operación urbanística vendrá acompañada de la construcción de 854 viviendas, de las cuales 361 serán de protección oficial. Precisamente éstas irán casi al lado del centro metropolitano. Pero cuatro años y dos días después todavía queda mucho por hacer.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios