Vuelve a abrir sus puertas la Residencia de Ancianas de la plaza de Candelaria

Desde el pasado sábado ha abierto de nuevos sus puertas el Asilo Dulce Nombre de María, conocido como la Casa Oviedo, en la plaza de Candelaria, que regentan religiosas de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl y en el que residen 47 mujeres mayores de 65 años.

La obligación de adaptar la residencia a las normativa vigente obligó al cierre de la misma hace dos años para realizar las obras, tiempo en el que la religiosas y 44 residentes han estado viviendo en Villa Milagrosa, una casa que las Hijas de la Caridad poseen en Jerez.

La reforma del inmueble ha reducido el número de habitaciones de 52 a 47, todas dotadas de cuarto de baño, además de ayudas técnicas, biblioteca, capilla, enfermería, salas de televisión y visitas, entre otros servicios.

Los trabajos, con un presupuesto de 1,8 millones de euros, han sido financiados por varias entidades, entre ellas Cajamadrid, con la que el pasado julio la Fundación Oviedo firmó un nuevo convenio de colaboración, tras aportar otros 180.000 euros hace dos años, otros 180.000 el siguiente y 140.000 el presente.

El pasado julio las religiosas ya manifestaron su deseo de regresar a la residencia de la capital antes de finalizar el presente año, una vez concluidas las obras para adaptarla a las normas de Asuntos Sociales.