La Universidad de Cádiz ha adecuado un software libre para la realización en modo electrónico de sus procesos electorales. Así, la UCA vuelve a apostar por la administración electrónica dentro de su estrategia de digitalización y sostenibilidad como recientemente hizo al integrarse en el Sistema de Interconexión de Registros (que permite el intercambio de asientos electrónicos de registro entre administraciones públicas). Este sistema, adecuado y pre-programado por técnicos del área de Sistemas de Información, se puso en marcha ayer con la elección de representantes de decanos y directores de departamento tras las pruebas y ensayos de funcionamiento realizados en las últimas semanas.

Tras meses de trabajo, de desarrollo informático y de procesos de validación, la labor de coordinación entre la Secretaría General y el área de Sistemas de Información del Vicerrectorado de Digitalización e Infraestructuras ha permitido disponer de una tecnología que sitúa a la Universidad de Cádiz entre las instituciones universitarias más avanzadas con la puesta en marcha de un innovador soporte tecnológico para que la totalidad de sus procesos electorales puedan realizarse de forma electrónica.

Recientemente, la Secretaría General de la Universidad de Cádiz, a través de su Dirección para la Administración Electrónica, presentó el nuevo software de elecciones electrónicas en una sesión a distancia con más de 70 participantes, entre profesorado y personal de administración y servicios. El sistema de elecciones electrónicas de la Universidad de Cádiz está basado en software libre, al que los técnicos del área de Sistemas de Información han realizado las adaptaciones requeridas por el Reglamento Electoral General de la UCA, aprobado en el claustro de diciembre de 2020. Además, se han practicado los cambios visuales para adaptar la aplicación al reglamento de identidad visual corporativa de la institución.

Para los electores, la aplicación es muy sencilla, pues utiliza la dirección de correo electrónico facilitada por la UCA a cada miembro de la comunidad universitaria, asignándole un usuario y clave únicos para cada votación. Pero, al mismo tiempo, el sistema es de una alta seguridad, pues la aplicación recubre el voto en el dispositivo del votante con un certificado y éste se remite cifrado a través de la red hasta la urna situada en el servidor central, que no puede abrirse sin la concurrencia de todas las llaves generadas previamente por los miembros de la mesa electoral y que están en su poder. El recuento se realiza con los votos cifrados, gracias al uso de protocolos homomórficos (para poder realizar operaciones directamente sobre los datos cifrados, sin la necesidad de descifrarlos previamente ni de contar con la clave con la que fueron cifrados), garantizándose la integridad y el secreto del voto emitido.

Con este sistema, se espera aplicar esta nueva tecnología, de una manera ágil y segura, a cuantas elecciones de órganos de la universidad sean posibles con la finalidad de normalizar la situación que se ha generado debido a la pandemia que ha impedido realizar numerosos comicios de forma presencial. Unas ventajas que, por criterios de comodidad, sostenibilidad y seguridad, pueden extenderse más allá de la situación sanitaria actual, siempre que así lo estime oportuno la correspondiente junta electoral.