Transforman un centro de mayores en residencia de estudiantes

De centro destinado a las personas mayores a estarlo para los estudiantes que inician sus carreras universitarias. Un grupo de empresarios gaditanos -que han creado la empresa Mi habitación en Cádiz- han adaptado la finca de la calle Antonio López esquina a Isabel La Católica, que hasta hace meses fue un centro de estancia diurna, en residencia de estudiantes. El proyecto, que se ha gestado a velocidad de crucero durante la recta final del verano, se hará realidad mañana viernes, cuando la residencia empezará a funcionar.

El centro contará con un total de 15 plazas, dispuestas en 9 habitaciones simples y otras tres dobles. Cuenta el edificio con planta baja, primera y segunda, en las que se reparten las doce habitaciones (seis en la primera y seis en la segunda planta) y los servicios comunes (un salón comedor y una sala de televisión, la lavandería, una cocina, baños repartidos por cada planta...). Como aspectos destacados, los empresarios indican que todo el edificio está dotado de las últimas tecnologías y de los sistemas y dispositivos de ahorro energético. Así, dispone de sistemas de aire acondicionado en cada habitación o de conexión wifi en todo el edificio.

Pero por encima de esto, el objetivo que más ha perseguido esta empresa es conseguir una residencia de estudiantes que tenga el ambiente más familiar y acogedor posible. "Que la gente se sienta como en casa, no como en las grandes residencias de estudiantes. Buscamos que sea algo más cálido", explica uno de los empresarios. Para ello, influyen todo tipo de aspectos, como el hecho de que la comida sea lo más casera posible, con cocineros que trabajarán diariamente para elaborar los menús para los estudiantes, o la decoración de habitaciones y pasillos, que contará con cuadros y grabados realizados por la artista Cándida Garbarino (que fuera directora del Museo de Cádiz).

Igualmente, para dotar de este ambiente familiar, la empresa prevé organizar excursiones, visitas y paseos por la ciudad para mostrar a los estudiantes los elementos más interesantes además de facilitar y procurar la convivencia entre ellos. Además, destacan también que la residencia de estudiantes está habilitada al 100% para personas con problemas de movilidad (tanto en el acceso como en el ascensor, los baños...). "Pretendemos dar las comodidades y necesidades que más demandan los estudiantes", indican estos gaditanos que han realizado previamente un sondeo para conocer los gustos y los aspectos más demandados por los usuarios de este tipo de equipamientos.

Desde la empresa Mi habitación en Cádiz explican que el proceso de adaptación del edificio a residencia universitaria ha supuesto todo un reto. Y es que después de formalizar la operación con la propiedad de la finca (mediante un contrato de alquiler con opción a compra) han tenido que ejecutar todas las obras necesarias, que actualmente están en fase de ultimar y de pequeños detalles. Aún así, están convencidos de que la iniciativa será todo un éxito. De hecho, aseguran que ya hay plazas ocupadas y otras que lo harán en los próximos días, antes de que comience el curso universitario. Entre las claves del éxito que los empresarios esperan del nuevo equipamiento están el hecho de que sea un equipamiento a estrenar completamente y también su ubicación, en pleno centro de la ciudad y a unos pocos minutos del grueso de facultades de la UCA en Cádiz.

La apertura de esta nueva residencia de estudiantes en la ciudad traerá consigo la creación de seis puestos de trabajo de manera directa. El precio de la habitación se establece (según la información de la página web creada por la empresa, mihabitacionencadiz.com) en un mínimo de 600 euros más IVA.

La residencia que abre sus puertas mañana viernes supondrá una experiencia piloto para esta empresa, que adelanta que si todo resulta de manera positiva, ya tienen otra finca en el casco histórico para abrir el próximo curso una nueva residencia de estudiantes, esta con capacidad para sesenta plazas. Y de cara a un futuro algo más lejano, si la iniciativa tiene aceptación y el desarrollo de la residencia marcha bien, también se plantean expandir este tipo de residencias -remarcando su carácter familiar y acogedor- a otras ciudades.