Tangos para la fiesta nacional de Argentina del 25 de mayo

Cada 25 de mayo, las redes consulares y embajadas de Argentina en todo el mundo celebran de alguna manera ese día de 1810 en el que "se dio el primer paso hacia lo que después sería la independencia", según el cónsul de Argentina en Cádiz, Agustín Alberto Núñez, quien explica que su país tiene la particularidad de conmemorar dos fechas históricas nacionales: el 25 de mayo de 1810 y la declaración formal de su independencia, el 9 de julio de 1816.

Este año, el Consulado de Argentina en Cádiz celebrará su fiesta nacional de mayo con una milonga que Cádiz Tango ha organizado para el próximo sábado en la Casa de Iberoamérica -cedida por el Ayuntamiento para la ocasión-. Allí, la música sonará a partir de las 21:00 y continuará hasta altas horas de la noche, adelanta Manuel Palomero, de Cádiz Tango. Pero antes, a las 13:00 horas, se inaugurará una instalación de la artista argentina Andrea Moccio, titulada El año del dragón, acompañada con vino y empanadas argentinas en la Sala Rivadavia.

Agustín Núñez, quien lleva poco más de un año en el cargo, afirma que Cádiz es "una ciudad muy cosmopolita", y le ha sorprendido "que tiene una actividad cultural que le correspondería a una ciudad mayor". Por eso, le parecía conveniente celebrar la fiesta nacional de Argentina del 25 de mayo con actividades culturales.

"Yo creo firmemente que el conocimiento acerca a los pueblos, y a veces el conocimiento se establece a partir de una respuesta a una curiosidad de saber cómo es el otro. Generalmente la cultura, la gastronomía y el deporte nos permiten conocernos y nos acerca. No hay peor mal para los pueblos que el desconocimiento. Por eso, a mí como diplomático me encanta tender puentes de conocimiento y lo hago a través de la relación cultural. Un artista, una milonga, ayuda a conocernos a españoles y argentinos", indica Núñez, a quien le parece "bárbaro" que exista "un grupo de entusiastas" como Cádiz Tango, al que piensa que "hay que darle todo el apoyo porque lo hacen con gusto, con pasión; los mueve otra cosa que la ganancia".

Al hablar sobre el tango, Agustín Núñez quiere hacer una aclaración, "porque el tango tiene varios momentos y, a veces, mucha gente se queda con el momento de tristeza o melancolía. Pero hay una cara muy alegre que es justamente la de la milonga, el tango bailable, que es lo que promueve Cádiz Tango". Para el cónsul, la milonga es "el tango arrabalero, el que se comparte, el tango más sensorial de pareja, y eso lo sabe disfrutar y compartir muy bien Cádiz Tango". Añade que la milonga no es algo excluyente, ya que "la pueden bailar desde los abuelos hasta los chicos jóvenes, y cada quien hará los pasos de acuerdo a lo que le da su conocimiento y su cuerpo".

Cambiando de tema, señala que la crisis se está notando en el Consulado. Actualmente hay muchos argentinos que están regresando a su país para buscar una mejor situación laboral. "Pero es la ley de las compensaciones -afirma-. Muchos llegaron aquí con nuestra crisis del 2001, entonces, han pasado una década aquí y vuelven. Muchos vuelven casados con españoles. He hecho muchas visas para españoles que van allá, lo cual me parece muy lindo porque la gente tiene que ser libre de poder elegir su devenir, y eso es muy bueno tanto para España como para la Argentina. Somos países libres y la gente no solo puede elegir donde está su oportunidad sino que además en cualquiera de los dos países se acoge muy bien a todos los ciudadanos". Cuenta que el consulado de Cádiz se reabrió en el año 2004. "Me comentaron que entonces se atendía a muchísima gente, las filas llegaban hasta la plaza San Antonio y daban la vuelta". Y declara que actualmente éste se encuentra entre los doce primeros, en cuanto a actividad, de los más de 100 consulados argentinos que hay en todo el mundo.

Respecto al hecho de ser compatriota del papa Francisco, afirma que le alegra muchísimo que sea jesuita porque él, que estudió 12 años en un colegio de la Compañía de Jesús en Buenos Aires, conoce esta orden y le parece que sus miembros tienen muy buena formación. "Tienen lo mejor de los dos mundos: del académico, porque son gente instruida, pero además también tienen la humildad del servicio a Dios y al prójimo". El hecho de que sea argentino "también es bueno porque trae una visión formada desde otra parte del mundo, además, el resto de Latinoamérica lo ha celebrado como papa latinoamericano, con lo cual, es doble la alegría para mí como argentino, por ser un papa argentino y latinoamericano", concluye.