El Ayuntamiento ha dado carpetazo al expediente de contratación del nuevo servicio de limpieza. Un “calvario”, en palabras del alcalde, que con la última resolución del Tribunal de Contratación Pública rechazando el recurso de Cointer y permitiendo la adjudicación a Valoriza llega a su fin… de momento. Y es que tanto el citado tribunal, dependiente de la Diputación Provincial, como el propio Ayuntamiento reconocen que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía aún puede dar un vuelco al escenario que ya dibujan en San Juan de Dios para los próximos días.

El Tribunal de Contratación ha rechazado el recurso de Cointer porque considera que la empresa ya no está legitimada para personarse en un proceso del que quedó excluida meses atrás. Y es que aunque la empresa inicialmente clasificada en primera posición sigue defendiendo la viabilidad de su propuesta y, por tanto, el deber de ser adjudicataria, el Tribunal reafirma en su última resolución que ya está fuera del proceso, al quedar confirmada mediante una anterior resolución y tras acuerdo plenario la exclusión de su oferta.

Esta teoría del tribunal coincide con el posicionamiento del Ayuntamiento, que ante el último recurso elevado por Cointer el pasado mes de octubre (lo que motivó la última paralización del procedimiento) defendía que “el interés legítimo de la recurrente en la interposición de recurso especial solo podrá admitirse si la eventual estimación de sus pretensiones condujera finalmente a la adjudicación del contrato a su favor, lo que no puede tener lugar”.

No obstante, tanto el Tribunal de Contratación como el propio Ayuntamiento vienen a reconocer que el procedimiento de contratación está aún a expensas de lo que determine el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Y es que tanto Cointer como Valoriza y el Ayuntamiento elevaron en su momentos recursos ante el tribunal andaluz, por diversos motivos. Por tanto, será el TSJA quien tenga la última palabra respecto al contrato de limpieza.

“Cointer puede obtener una sentencia favorable a sus intereses que determine, en última instancia, una eventual adjudicación del contrato a su favor”, llega a afirmar el Ayuntamiento, tal y como refleja la última resolución del Tribunal de Contratación.

Eso sí, el pronunciamiento del TSJA puede demorarse años, en contra del interés del Ayuntamiento de adjudicar cuanto antes un contrato que acumula ya más de seis años de retraso.