Proyectan la reapertura de la iglesia de la Pastora, cerrada desde 2008

En 2008 cerró sus puertas para ser sometida a una intervención de consolidación de su estructura. En principio, los trabajos se iban a alargar durante seis meses; pero después de más de tres años, las puertas de la iglesia de La Pastora siguen cerradas. Y eso es lo que se proponen revertir ahora los feligreses de la parroquia de San Lorenzo -a la que pertenece, también con la consideración de parroquia, La Pastora-. Un grupo de fieles, con el párroco Jesús García Cornejo al frente, está trabajando para devolver la actividad al templo de la calle Sagasta y evitar así un cierre indefinido que podría derivar en el olvido de una de las principales joyas arquitectónicas de la Iglesia local.

García Cornejo ha mostrado su inquietud y preocupación por este asunto desde que fue nombrado párroco de San Lorenzo y La Pastora. Y es que una vez realizadas las obras de consolidación de la estructura del templo, el Obispado consideró que seguían sin reunirse las condiciones mínimas para la celebración de cultos en su interior y comenzó a trabajar en la búsqueda de fondos para acometer una segunda fase que sería la rehabilitación del templo y restauración de altares, paramentos y otros elementos. Una labor más que complicada en estos tiempos de crisis que ha llevado a mantener la iglesia cerrada desde junio de 2008.

Así, ahora se pretende que mientras se sigue buscando esa financiación que haga posibles futuras intervenciones en La Pastora, el templo vuelva a tener actividad, aunque ésta sea mucho más limitada que antes de cerrar.

Actualmente, el interior de esta iglesia de la calle Sagasta ya está completamente desprovisto de andamios y otros materiales de obras. Pero las dependencias anexas sí siguen estando en bastante mal estado y muchas de ellas son inaccesibles al encontrarse apuntaladas por motivos de seguridad. Ante este panorama, la intención de los feligreses sería celebrar algunas misas y otro tipo de actividades en el interior del templo, "aunque sólo sea de manera temporal", matiza el párroco.

Con esta intención se está trabajando por parte de estos feligreses, buscando la mejor manera de reabrir La Pastora. García Cornejo quiere abordar esta cuestión con la comunidad parroquial a principios de curso, siendo a raíz de entonces cuando se llevaría a cabo la reapertura del templo según los acuerdos o consideraciones que tome la comunidad.

Paralelamente, el Obispado y el propio párroco seguirán trabajando en la búsqueda de acuerdos o financiaciones con administraciones públicas o con empresas privadas para acometer las necesarias obras de rehabilitación.

En el año 2008, fueron la Junta de Andalucía y la entidad bancaria Cajasol quienes colaboraron en las obras de consolidación que se hicieron, aportando cada una de ellas 93.500 euros. Ahora, la cuantía del proyecto de rehabilitación se desconoce, teniendo en cuenta que habría que actuar sobre las dependencias anexas, sobre el interior del templo y sobre todos los bienes muebles, lo que conllevaría también la recuperación de piezas y la eliminación de añadidos para que se parezca lo máximo posible a la iglesia que fue concebida en el primer tercio del siglo XVIII.

La capilla del Beato, otro templo a la espera de reabrir sus puertas

Corría también el año 2008 cuando la hermandad del Prendimiento trasladó a sus titulares a la iglesia del Carmen y cerró al culto la capilla del Beato Diego José de Cádiz a la espera de las obras de restauración. El mal estado del templo así lo aconsejaba. Y tres años y medio después, la hermandad sigue a la espera de poder retornar a su sede canónica de la calle Bendición de Dios.

Diversos obstáculos con las obras y retrasos añadidos mantienen a día de hoy cerrada al culto la capilla, lo que además supone una complicación añadida a la corporación del Lunes Santo, que tiene que recurrir a locales externos para poder almacenar su patrimonio (habitualmente distribuido en las distintas dependencias de la casa anexa al templo, donde nació el Beato).

Las últimas previsiones apuntaban al mes de mayo como fecha de apertura al culto de esta pequeña iglesia. Pero de momento, los cofrades del Prendimiento siguen 'realojados' en la iglesia del Carmen y la capilla del Beato Diego sigue con las puertas cerradas. Y ya han pasado tres años y medio.