La crítica reacción del alcalde, José María González, a la polémica generada por la compra de un chalé de más de 600.000 euros por parte de los dirigentes de Podemos Pablo Iglesias e Irene Montero, encontró ayer respuesta en el cofundador del partido, Juan Carlos Monedero, que acusó a la corriente de Izquierda Anticapitalista -a la que pertenece José María González- de intentar "crecer posiciones" utilizando esta polémica.

Recordó Monedero situaciones como el "apoyo a la independencia de Cataluña, que nosotros entendemos que es un desliz, o que calla cuando un alcalde suyo vende armas a la dictadura de Arabia Saudí o cuando se condecora una Virgen, que lo entendemos porque en su función de alcalde tiene que hacerlo", manifestó a los periodistas en Sevilla en una clara alusión al regidor gaditano, que tras saltar la noticia del chalé el viernes manifestó: "No quiero dejar de vivir en un piso de currante en el barrio de La Viña", afeando la actuación de Iglesias y Montero.

"Entrar en un linchamiento tan evidente demuestra que Izquierda Anticapitalista tiene la inveterada costumbre de hacer malos análisis", expuso ayer el exdirigente de Podemos, que consideró "triste" que este sector adherido a la formación morada "aproveche esta situación para intentar crecer posiciones".

Ya el domingo, Monedero comparecía en la televisión (en la cadena La Sexta) para defender a Pablo Iglesias e Irene Montero con la compra del chalé; y ayer volvió a salir en su defensa, atacando también en esta ocasión a la prensa española. "Es muy fascinante que en el país de casos como Lezo, la Gürtel, la Púnica, los másters falsificados, de Mariano Rajoy, del cien por cien de los tesoreros del PP imputados por corrupción o de campañas dopadas con dinero público obtenido fraudulentamente a través de contratos públicos, llevemos más de una semana con el tema de un chalé donde dos personas jóvenes se han endeudado a treinta años", afirmó preguntándose "qué tipo de prensa tenemos en España".

Por último, defendió también la consulta planteada por el líder de Podemos sobre su continuidad en el cargo tras estos hechos acaecidos, criticando que los medios "han construido de una cuestión personal un problema de linchamiento mediático", lo que entiende que lleva incluso a "un trasvase de las líneas rojas que no se debiera consentir".