San Fernando y Algeciras, Camarón y Paco de Lucía, la voz y la música, "la garganta prodigiosa y la guitarra imposible", "nuestros Lennon y McCartney", la "cara y la cruz de una misma moneda", las gaditanas columnas de Hércules que, a cada lado de la provincia, sostienen en pie al flamenco... Esa dualidad, esa reciprocidad, fue la constante que ayer marcó el tono de todos los discursos que se repitieron en el Real Teatro de Las Cortes, donde La Isla y Algeciras -a las puertas de las fechas más destacadas del Año Camarón- rubricaron el hermanamiento que ambos municipios aprobaron en 2015.

Con la prodigiosa y señera guitarra de Paco Cepero y la voz de David Palomar, unidas por primera vez, sellaron a lo grande ambos municipios esta alianza en un emotivo homenaje a Camarón y Paco de Lucía que llegó por alegrías y bulerías y que puso en pie al público. El jerezano aprovechó la ocasión para recordar unos versos escritos tras la muerte de los que fueron "sus hermanos" y estrenar una composición dedicada a ambos. Por su parte, el cantaor gaditano se atrevió con las letras que cantara Camarón en una actuación que -admitió- le infundía un profundo respeto y de la que ambos salieron más que airosos como los asistentes al acto les reconocieron con tímidos jaleos y un caluroso aplauso final.

Fue un acto de fraternidad entre las dos ciudades pero también -y sobre todo- un homenaje a los dos "titanes" del flamenco que tanto La Isla como Algeciras aspiran a convertir en marca de ciudad. Una cita a la que asistió la viuda del cantaor isleño, Dolores Montoya, Chispa, y su hijo Luis; y que amadrinó -con un retraso de más de 40 minutos debido a un imprevisto- la consejera de Cultura, Rosa Aguilar, para poner nuevamente de manifiesto el enorme potencial de Camarón y Paco de Lucía y su legado.

Antes, en el Castillo de San Romualdo las corporaciones municipales mostraron la buena sintonía que ha caracterizado todo el proceso administrativo. El alcalde algecireño, José Ignacio Landaluce, se encargó de dejar constancia en el Libro de Honor del Ayuntamiento de la visita a tierras isleñas por tan destacados motivos. La alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada, obsequió a su homónimo algecireño con dos grabados: un retrato de Camarón y los edificios constitucionales de la ciudad.

Dos símbolos más de este vínculo se vieron después en el Teatro, tras la firma de la simbólica acta de hermanamiento entre San Fernando y Algeciras: la entrega de la Llave de Oro de La Isla por parte de Patricia Cavada a José Ignacio Landaluce y el descubrimiento del artístico pergamino que ilustra y da forma a la unión de las localidades natales de José Monge Cruz y Francisco Sánchez Gómez.

Fue el momento central del acto institucional que ayer, como dijo el primer teniente de alcaldesa del Ayuntamiento isleño, Fran Romero, se llevó a cabo "en el Real Tablao de Las Cortes" para rendir tributo a la memoria de la pareja más flamenca, al "guitarrista redondo" y a "la voz desgarrada que evocaba por sí sola la desolación de un pueblo".

El edil se atrevió a iniciar en verso y con alusiones explícitas a las temas de Camarón y Paco de Lucía la glosa de rigor que exige el protocolo en este tipo de actos para hablar -primero- del Camarón más humilde que nace y se hace en La Isla y -luego- de la leyenda que se forja junto a Paco de Lucía. "Paco sabía interpretar lo que Camarón quería decir con su quejío; leyendo entre líneas en su garganta, en sus inflexiones de voz, en sus pausas y respiraciones; en cómo improvisaba el colorido de los distintos palos flamencos. Una relación simbiótica que les hizo entenderse y complementarse".

El alcalde de Algeciras en el mismo tono poético que ayer impregnó todo el acto de hermanamiento resaltó las bondades de ambos artistas, su talento y su empuje, que unían a través del flamenco a sus ciudades natales, hasta ahora en la calle y desde ahora en lo institucional para que sea una oportunidad de futuro, "de engrandecer la historia de San Fernando y de Algeciras", como "recíprocamente la guitarra fue a la voz, y la voz fue a la guitarra". "Estamos escribiendo todos un futuro directo al destino común, más próspero y feliz", pronunciaba Landaluce. La Isla y Algeciras juntas, como entonces Camarón y Paco de Lucía, que alcanzaron "la conjunción perfecta". Es el espejo en el que ambas ciudades deben mirarse, para aprovecharse, como "patrias de arte", del "desarrollo turístico, cultural y económico" que se vislumbra en el legado de ambos genios del flamenco.

Patricia Cavada ahondó en el vínculo entre ambas tierras por la relación entre Camarón y Paco de Lucía, por las vivencias de José Monge Cruz en Algeciras y de Francisco Sánchez Gómez en San Fernando, por su origen humilde, por la transformación del flamenco que protagonizaron "con el mismo afán de respeto a la tradición que de desobediencia a la misma"; que lleva ahora a La Isla y Algeciras al hermanamiento. "El alcalde sabe perfectamente que este hermanamiento no es gratuito. Que nos obliga a ambas corporaciones a viajar juntas en la búsqueda del porvenir", ahondaba en la misma idea que Landaluce. Juntas asumen la responsabilidad de mantener vivo a ambos.

La presidenta de la Diputación Provincial, Irene García, arropó también este acto que parte del genio de "dos gaditanos universales" para lanzar un mensaje bien claro: el de la provechosa unión que esta iniciativa puede llegar a ser para La Isla y Algeciras, y también para la generalidad de la provincia. "Si Camarón y Paco no son patrimonio de nadie, las instituciones no debemos instrumentalizarlos. Muy al contrario se trata de actuar con responsabilidad, pensando siempre en el superior interés general. De hacer política con mayúsculas", dijo.

Y apeló así a las tres dimensiones -la cultural, la de difusión entre la sociedad y la que supone su aprovechamiento como recurso turístico- que esta apuesta por el flamenco, por Camarón y Paco de Lucía, debe tener. "Nunca hubo duda de que tuviéramos talento en la provincia de Cádiz, solo hacía falta apostar también por el talante", afirmó la presidenta de Diputación Provincial.