Cierra al público la Torre de Poniente de la Catedral

El público no puede ya visitar la Torre de Poniente de la Catedral gaditana. Después de más de diez años del descubrimiento de este monumento, el acceso permanecía cerrado en el día de ayer, después de que Monumentos Alavista haya tenido que devolver las llaves al Cabildo Catedral según ha dictado finalmente una sentencia que culmina años de proceso judicial por la falta de acuerdo entre las dos partes.

Tras este cierre al público de la Torre de Poniente, será ahora el Cabildo Catedral el que tenga que decidir el futuro de este espacio del templo referencia de la diócesis. Y para ello, el primer paso marcado por los canónigos será poder acceder a la torre y comprobar su actual estado de conservación. Algo que el abogado del Cabildo explicaba en la tarde de ayer que no había ocurrido puesto que no disponían aún de las llaves, al no haberse producido la entrega de las mismas por los cauces habituales.

Se abre, por tanto, un período de inactividad en esta torre, cuyo futuro previsiblemente pasa por dos opciones. Una nueva encomienda a un tercero de la explotación turística y cultural del monumento (como ya ocurriera en 2003 con Monumentos Alavista), o asumir por parte del propio Cabildo la reapertura de este espacio y el sistema de visitas al público.

En caso de optar por esta segunda vía, el Cabildo se haría cargo de todo lo relacionado con la visita turística al primer templo de la diócesis, ya que en la actualidad ya gestiona la parcela turística de la propia Catedral así como la del museo catedralicio (en la Casa de Contratación de la plaza de Fray Félix). Así, en el futuro se incluiría también esta explotación turística de la Torre de Poniente, ampliando el circuito turístico que afecta a esta Catedral.

Curiosamente, el Cabildo está inmerso en estos momentos en una renovación, adaptación y mejora de las prestaciones y servicios que ofrece a los visitantes. Para ello, una empresa especializada en el sector turístico está elaborando un informe que señalará las necesidades de mejora, las posibilidades de incluir nuevos elementos y las claves de una mejor atención, para lograr así una mayor satisfacción de los turistas que visitan el primer templo y, al mismo tiempo, una mejor explicación cultural y catequética de la arquitectura y del arte que incluyen las naves y capillas de esta iglesia.

Los canónigos no tienen previsto reunirse hasta la próxima semana, que es cuando podrían comenzar a tomarse decisiones en relación a este futuro uso y explotación de la Torre de Poniente, que por el momento permanecerá cerrada al público.