Los vecinos del Cerro del Moro ven más cerca el final de la remodelación del barrio, un proyecto que está desarrollando la Junta de Andalucía y que lleva parado desde el año 2012, cuando se entregaron las llaves de los pisos nuevos correspondientes a la sexta fase -la última que se construyó-.

Representantes de las comunidades de vecinos de los edificios de la octava y última fase del proyecto, encabezados por la presidenta de la Asociación de Vecinos Claridad del Cerro del Moro, Candelaria Grimaldi, mantuvieron recientemente una reunión con el delegado territorial de Fomento y Vivienda en Cádiz, Federico Fernández, y el director de la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía, AVRA, Joaquín Muriano. En este encuentro, los representantes de la administración andaluza explicaron los pasos que quedan por dar para acabar el proyecto y los planes de la Junta al respecto.

Así, las familias afectadas pudieron conocer un avance del anteproyecto de construcción de las 67 viviendas que se levantarán en el lugar que actualmente ocupan los viejos bloques de la séptima fase -que se encuentran en estado ruinoso, con puertas y ventanas tapiados para que no entren okupas- una vez que se derriben, así como las condiciones generales de la operación para su realojo.

Federico Fernández pidió la complicidad y colaboración de los vecinos en la actuación proyectada, una intervención que está pendiente de la aprobación municipal de un convenio urbanístico entre la Consejería de Fomento y Vivienda, y el Ayuntamiento de Cádiz.

La presidenta de la asociación de vecinos, Candelaria Grimaldi, manifestó ayer que la información que han recibido los vecinos les ha devuelto la tranquilidad y la ilusión en el proyecto, ya que "se estaban escuchando muchos rumores y los vecinos estaban desilusionados después de tantas promesas incumplidas; algunos incluso pensaban que no iban a ver sus viviendas nuevas, como ya ha ocurrido en varios casos".

Grimaldi reconocía que estas familias están deseando abandonar los edificios que habitan, ya que se encuentran en muy malas condiciones: son muy antiguos y tienen grietas, humedades y, desde hace tiempo, se desprenden cascotes de la fachada y del vuelo de la cubierta. Candelaria Grimaldi aseguraba que este invierno han pasado miedo debido a los temporales que se sucedieron hace unos meses.

Desde la Junta recordaban ayer que la Consejería de Fomento y Vivienda, a través de la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía como gestora del parque público residencial, se está haciendo con las escrituras de propiedad de las 47 viviendas que formaban parte de la séptima fase del cerro del Moro, algunas de las cuales están resultando de gran complejidad al no disponer sus propietarios de la documentación en regla o por presentar problemas de herencia o de otra índole. El proceso podría agilizarse una vez que el Ayuntamiento apruebe la declaración de ruina de los tres edificios, cuyo proyecto de demolición ya se encuentra redactado.

El derribo de dichos inmuebles será posible una vez que la Junta tenga la propiedad de todas las viviendas. Desde la administración andaluza insistían en que las nuevas actuaciones previstas, como la construcción de las 67 viviendas proyectadas y la reordenación de los espacios, están pendientes de que el Ayuntamiento de Cádiz dé su conformidad al convenio urbanístico necesario para el desarrollo de la Unidad de Ejecución en ese ámbito.

La nueva promoción de viviendas podría permitir la reubicación de familias residentes en la octava fase de intervención del barrio, cuya viabilidad se está estudiando, igual que los vecinos de la séptima fase fueron realojados en los edificios de la sexta fase de intervención y en otros inmuebles del parque público residencial.

La Junta de Andalucía tiene previsto destinar a la construcción de la séptima fase de remodelación del Cerro del Moro una cantidad estimada en 6,9 millones de euros, aparte del coste de la adquisición de las viviendas viejas y su demolición, que supondrían 2,6 millones de euros más, con lo que la inversión total superaría los 9,5 millones de euros.