Canalejas deja de ser el parking más barato de la ciudad

El próximo 1 de febrero entran en vigor las nuevas tarifas de los aparcamientos que gestiona la Empresa Municipal de Aparcamientos (Emasa). Una de las novedades más importantes será que el primer minuto pasará a costar 0,05 céntimos de euro, una pequeña subida atendiendo al IPC. El aparcamiento que sí experimentará una subida más elevada será el de Canalejas, que llevaba años siendo el más barato de la ciudad al regirse por el precio del carbón y los hidrocarburos. De hecho, este parking tenía un precio a la hora más barato que la misma zona azul de la avenida del Puerto, algo que no tenía demasiada lógica. Los propietarios del parking de Canalejas se habían quejado en alguna ocasión de que Emasa hacía competencia desleal teniendo precios tan baratos. Incluso llevaron sus quejas a los tribunales de justicia, que les dieron la razón, aunque ha sido necesaria la firma de una nueva concesión para que pudieran equiparar sus precios a los del resto de aparcamientos subterráneos de la capital gaditana. Con la nueva licencia y la ampliación de la concesión, sus precios también se regirán por el IPC, como el resto, por lo que pasará de ser el más barato, con un precio por hora que apenas superaba los 60 céntimos, a costar 1,20. Sin embargo, el abono mensual de este parking sí que es el más caro: 152,70 euros, por delante de San Antonio, en el que tener una plaza durante todo el mes sin límite horario cuesta 136,60. Entre los aparcamientos subterráneos, el abono más barato lo tiene San José, con 86,47 euros, seguido de Cortadura, con 89, Varela, con 90,13 y Gadir (en la antigua Telegrafía sin hilos), en el que cuesta 95 euros. Entre los aparcamientos en superficie el abono más barato es el de la Estación de Trenes, que cuesta 48 euros, seguido por el del Campo de las Balas con 50 y el existente en la Cuesta de las Calesas, cuyo precio al mes es de 55 euros. Este último está siendo explotado por Emasa desde el pasado mes de diciembre. El abono nocturno de la ciudad más barato es el que tiene el parking de Cortadura, que sólo cuesta 30 euros, mientras que el más caro es el de Canalejas, 53,95 euros.

Los aparcamientos de la ciudad tienen numerosos condicionantes y sus precios varían sustancialmente según la estación del año. Por ejemplo, en invierno una de las dos plantas del aparcamiento de Ingeniero La Cierva está prácticamente desierta, mientras que en verano Emasa incluso quita los abonos para residentes y deja todas las plazas para rotación de vehículos. Lo contrario ocurre en el Campo del Sur, que en verano está mucho más vacío que en la temporada invernal.

Actualmente, y a pesar de la ampliación, en Canalejas hay lista de espera para poder conseguir un abono mensual. Uno de sus encargados comentó a este medio que están a la espera de que tras las reformas que se están produciendo puedan aumentar el número de plazas disponibles y aliviar su larguísima lista de espera.

José Blas Fernández, presidente de Emasa, comentó que las plazas de rotación están creciendo hasta alcanzar casi el 25% de las plazas existente. "Creemos que la política que estamos siguiendo en esta materia es la correcta, además, cuando se abra el parking de Santa Bárbara se abrirá mucho más el abanico de posibilidades".

El concejal popular considera que, en el futuro, la intención municipal es que la gran mayoría de las plazas de aparcamiento en el casco histórico sean para residentes. "Algo que ya ocurre en el parking de la plaza Reina Sofía", dijo.