De Cádiz a Madrid para salir del paro

Cinco jóvenes gaditanos han encontrado trabajo fijo en un mismo restaurante madrileño

De izquierda a derecha, José Luis Rodríguez, Jesús Benítez Ucero, Daniel Rodríguez y Antonio Caramé.
De izquierda a derecha, José Luis Rodríguez, Jesús Benítez Ucero, Daniel Rodríguez y Antonio Caramé.
Emilio López Cádiz

13 de enero 2013 - 01:00

Los hermanos Daniel y José Luis Rodríguez Pujazón, Jesús Amador Pantoja, Jesús Benítez Usero y Antonio Caramé López son cinco gaditanos que han encontrado empleo aunque para ello han tenido que dejar su Cádiz natal y trasladarse a Madrid, donde trabajan los cinco en el restaurante Seis Ocho, en la calle Albasanz.

Daniel Rodríguez fue el primero que logró el empleo y tiró de su hermano José Luis, a los que se unieron luego Jesús Amador (que está ahora de vacaciones), Jesús Benítez y Antonio Caramé, el actual jefe de cocina, que forman parte del equipo de doce personas del establecimiento de Begoña Fraire, que abrió sus puertas el pasado junio.

Jesús Benítez recuerda que trabajó de camarero en el catering de El Faro, donde se sentía muy a gusto, pero bajaron los servicios y sobraba personal, por lo que tuvo que dejarlo, para luego encontrar sólo empleo en precario, hasta que Daniel Rodríguez lo llamó y en abril decidió marcharse a Madrid con su novia, Rosario Vera, que también trabajó en el restaurante y ahora está en una empresa vinculada a El Corte Inglés

Echa de menos a su hijo de 12 años, que sigue en Cádiz, al igual que a sus padres, que viven en la plaza de Capuchinos, y las reuniones de amigos en El Manteca o en Casa Fernando, "pero no se puede vivir de trabajo temporales o sin papeles, en Madrid también se nota la crisis pero hay más posibilidades que en Cádiz de encontrar algo", asegura.

Reconoce que echa de menos muchas cosas, desde la playa, que sustituye por el pantano de San Juan los días que libra, y al Carnaval, "que seguiré por Internet" .

Por su parte, Antonio Caramé se inició en el oficio como pinche en la arrocería La Marea, pero aspiraba a más y aceptó la oferta para formar parte del equipo de Seis Ocho, del que es jefe de cocina.

Reconoce que la situación laboral esta muy mal en Cádiz, pero también afirma que los emprendedores encuentran poco apoyo, "no se valora lo suficiente a los que están dispuestos a asumir un riesgo", y pone de ejemplo de esa iniciativa a dos reconocidos chefs gaditanos, Ángel León y Mauro Martínez, "que ahí no se les considera lo suficiente".

También entiende que existe demasiado conformismo en la gente, pese al elevado número de parados que tiene la capital gaditana. "Hasta nos cachondeamos de los pocos que protestan cada día delante del Ayuntamiento por la situación y mientras que no falten las colas para el Falla", apunta.

El chef de Seis Ocho reconoce que le gusta el Carnaval, en el que ha participado nueve años seguido formando parte de agrupaciones, la última la chirigota 'Las Pitorrisas', que logró el primer premio en 2008, "pero lo primero es lo primero y me conformaré con escuchar las coplas por Internet".

Echa de menos a sus padres, que viven en la calle Sagasta, y a su ahijada, pero reconoce que "gracias a empresas como esta tenemos trabajo un grupo de gaditanos, lo que nos encantaría que nos hubiera sucedido en Cádiz".

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