El nombre del Carranza se decidirá en un proceso participativo
El procedimiento acabará con una votación popular, al igual que ha sucedido con la elección de los carteles del Carnaval de 2017 y 2018
Cádiz/La decisión de retirar el nombre de la avenida Ramón de Carranza del callejero de Cádiz para sustituirlo por la avenida Cuatro de Diciembre, que va a ser aprobada hoy por el Pleno del Ayuntamiento tras llegarse a un acuerdo entre Por Cádiz sí se Puede, Ganar Cádiz en Común y PSOE, va a tener un efecto colateral en el resto de la simbología que está unida al exalcalde de la capital gaditana. Entre ella está el nombre del estadio de fútbol en donde el Cádiz CF juega sus partidos, que se inauguró en 1955. La lógica apuntaba que, al ser un edificio de propiedad municipal, se iba a producir este cambio para dar cumplimiento a la Ley de Memoria Histórica. Aunque el debate ya existía e, incluso, el equipo de Gobierno ya se había pronunciado sobre esta cuestión, el concejal de Memoria Democrática, Martín Vila, anunció ayer que se va a abrir un proceso participativo para decidir la nueva denominación. Esto llevaría a que una comisión depure en primer lugar las propuestas que se hagan antes de trasladarlas a una votación popular.
Este debate se abre a partir de hoy una vez que la Corporación apruebe la variación del nombre de la avenida que conecta la plaza de España con San Juan de Dios. Aunque parezca una cuestión sin importancia, el cambio del nombre del recinto futbolero tiene una implicación diferente al de la citada avenida por la división entre lo sentimental -la vinculación entre el Cádiz CF y su estadio trasciende más allá de Cortadura- y lo puramente legal. Para el Ayuntamiento la balanza se ha decantado por lo que marca la normativa vigente, especialmente porque el actual equipo de Gobierno ha sido quien ha activado el proceso para la eliminación tanto del callejero como de los edificios públicos de todo elemento que recuerde a la dictadura franquista.
De momento, poco avanzó Vila sobre cómo se va a realizar este proceso participativo. De hecho, su puesta en marcha depende del trabajo que se está finiquitando desde la Comisión de Retirada de Simbología Franquista para la elaboración de un catálogo de todos los elementos y las calles que guardan relación con el golpe militar de 1936 y la posterior dictadura. A partir de este trabajo documentado, se procederá a la eliminación de toda esta simbología, entre ellas toda la relacionada con la figura de Ramón de Carranza. Por ello, el concejal de Ganemos afirmó que "cuando tomemos la decisión de cuáles son las distinciones y los honores que deba tener Ramón de Carranza" se materializarán los cambios, apuntando a la retirada del cuadro que se encuentra en la Sala de Honores de la Casa Consistorial, el busto que está en la zona noble de San Juan de Dios y el nombre del estadio, quedando en el aire el Trofeo Carranza.
La única pista que dio Vila para conocer cómo puede ser este proceso participativo es el ejemplo que puso con el procedimiento para la elección del cartel anunciador del Carnaval de Cádiz de los años 2017 y 2018. En primer lugar, un jurado hizo la primera criba para, posteriormente, realizarse la designación por votación popular. El primer teniente de alcalde se afanó en pedir "calma" a los periodistas ante las preguntas sobre todos los cambios que se van a realizar para aplicar la Ley de Memoria Histórica, por lo que no se marcó un plazo de tiempo. Por ello, quiso ir paso a paso al remarcar como un "hito" la decisión que va a tomar hoy el Pleno municipal. A partir de ahí, "abriremos el proceso participativo", teniéndose que tomar la determinación de cerrar "quiénes participan" en él.
Con el objetivo de que se abra este procedimiento a "la afición amarilla", Vila sí puso los límites de lo que se va a permitir desde el Ayuntamiento. El edil de Ganar Cádiz destacó que el estadio "no puede tener el nombre de nadie, obviamente, vinculado con el franquismo, con la exaltación de la represión, ni ningún nombre que suponga una vulneración de derechos, ni ningún nombre que tenga ningún tipo de connotación ni sexista ni machista ni de ningún tipo".
Incluso, Vila también cerró la posibilidad de que el recinto futbolero pase a llamarse sólo Estadio Carranza, tal y como se ha propuesto desde la AVV Manuel de Falla de La Laguna y algún sector del cadismo para salvar la Ley de Memoria Histórica. El portavoz de Ganar Cádiz sentenció que "entendemos que el nombre Carranza está perfectamente vinculado" al exalcalde gaditano, por lo que no sería posible su mantenimiento.
Otra posibilidad que trató en la rueda de prensa que dio Vila tras la Junta de Gobierno Local de ayer fue la propuesta del PSOE de la búsqueda de un patrocinador que pague una importante cantidad económica que serviría para financiar las actividades del Instituto Municipal de Deportes. Ante esto, el edil indicó que será "en el órgano rector del IMD donde se valore la idoneidad".
Manuel Vizcaíno "Habría que consultar el cambio con todos los cadistas"
La postura oficial del Cádiz sobre el cambio del nombre del estadio Ramón de Carranza es que si se produce una modificación el nuevo "lo deben elegir los cadistas", considera el presidente, Manuel Vizcaíno, que plantea el interrogante de cómo se encuadraría la opinión de los aficionados si se tiene en cuenta que hay seguidores del Cádiz en muchos lugares más allá de la propia ciudad. El mandatario del club apunta que el nombre del estadio "es una marca reconocida en el mundo de un valor incalculable, en ese estadio con ese nombre han jugado los mejores futbolistas del mundo. Mucha gente no sabía quién era Ramón de Carranza, el nombre trasciende a la persona". Vizcaíno se refiere a la actual denominación del estadio, inaugurado con ese nombre en 1955, como impacto de la marca si entrar en otras consideraciones porque en la entidad cadista tienen muy claro que "no nos metemos en temas políticos". Si el Ayuntamiento, que tiene cedido el uso del estadio, municipal, hasta 2031, decide que hay que modificar el nombre, el presidente insiste en que habría que tener en cuenta la opinión de los cadistas. "Sería triste no escuchar a los aficionados, que sea el cadista el que decida cómo se llama, sería lo lógico, habría muchas formas de encuadrar a los cadistas". El dirigente argumenta que el Cádiz "está al servicio" de la sociedad y no quiere imponer un posible nombre, es algo que corresponde a la gente". Defiende que sea un proceso participativo y resalta la buena sintonía con el Ayuntamiento. "Hasta hoy el alcalde y el teniente de alcalde de Urbanismo no dan un paso relacionado con el Cádiz sin hablar con nosotros. ¿Y que pasaría con el Trofeo? Se sigue llamando Ramón de Carranza y Vizcaíno tiene clara su opinión. "Es un patrimonio de la ciudad que no se puede perder.
Perderíamos un valor importante, es un Trofeo conocido en todo el mundo. Sonaría extraño un Trofeo sin su nombre actual. Tendrían que decidir los aficionados". El Ayuntamiento tiene cedida la organización del Trofeo al Cádiz. /J.J.N.
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