Hace 250 años se convirtió en la primera parroquia castrense de España, por deseo del rey Carlos III y tras la aprobación del papa Clemente XIII. Ayer, el templo erigido en la plaza del Falla inició el programa de actos conmemorativos de este hecho histórico. Un aniversario que coincide en el tiempo con la necesidad de acometer la rehabilitación integral del edificio.

La preocupación de la iglesia en los últimos tiempos y con los escasos medios que tenía a su alcance se ha centrado en actuar sobre el templo, en el que ya se ha actuado en las cubiertas, en la fachada y en el interior. Pero hace unos meses, las dependencias parroquiales que ocupan el edificio anexo a la iglesia quedaron cerradas al público por decisión del Ministerio de Defensa, debido al mal estado que presentan y al peligro de desprendimiento. De hecho, algunos de esos espacios se mantienen hoy apuntalados por cuestiones de seguridad.

Este cierre de las salas y aulas de las que dispone la parroquia conlleva un importante revés para la actividad cotidiana de la Castrense. Las reuniones y actividades de los distintos grupos, la impartición de las distintas catequesis y otros servicios se han visto seriamente alterados con la pérdida temporal del edificio contiguo al templo, donde también tenía establecida su casa de hermandad la cofradía de Expiración, otra de las entidades afectadas por el mal estado de conservación que presenta el templo.

Hace unos meses se produjo una primera toma de contacto entre el Ministerio de Defensa, el Ayuntamiento, el Obispado y otras entidades para abordar la necesaria intervención en el edificio. A priori, el Consistorio se mostró receptivo a una colaboración si se planteaba una actuación conjunta. Un proyecto que rondaba -según los primeros estudios realizados por el ministerio- el millón de euros y sobre el que hasta el momento no se ha avanzado en nada, manteniendo la parroquia su actividad sin el uso de las dependencias parroquiales.

La noticia positiva será la apertura de un nuevo centro parroquial, que llevará por nombre Padre Luis León Muñoz y que será bendecido el próximo día 22, coincidiendo con los actos de este aniversario que ayer empezó a celebrarse en el interior de la Castrense. Este aniversario, en concreto, se cumple el 19 de octubre, que fue cuando el papa Clemente XIII firmó la creación de la parroquia castrense. Ese día, habrá un Te Deum y posterior misa solemne; teniendo continuidad la celebración el domingo 26 de ese mes, cuando el arzobispo castrense, Juan del Río, acuda a Cádiz para presidir una función solemne.

Desde ayer y hasta ese 26 de octubre, diversos son los actos programados por la comunidad de la Castrense. Una parroquia que ha cumplido 250 años y que está a la espera de una rehabilitación (para la que incluso se ha creado ya una asociación que trabajará en este camino) que garantice y asegure su mantenimiento en la ciudad durante muchos más aniversarios.