Si cobras en caja y haces facturas, ojo: lo que pasará en Cádiz cuando entra en vigor Verifactu en 2026

En muchas barras de Cádiz y en la trastienda de no pocas tiendas de la provincia ya se oye el mismo comentario. “Dicen que Hacienda va a controlar aún más las facturas”. El nombre técnico es Verifactu y, aunque a muchos les suene lejano, llega con fechas, normas y sanciones muy concretas.

Detrás de las conversaciones de bar hay una pregunta muy clara: qué va a pasar con mi negocio cuando cambien las reglas y, sobre todo, qué significa exactamente eso de saber cuando entra en vigor Verifactu si tengo un bar, una tienda o un pequeño negocio en Cádiz.

La realidad es que Verifactu no es un simple cambio de formulario. Es el sistema que va a marcar cómo deben comportarse los programas con los que hoy cobras en caja, generas tickets y emites facturas. Y sí, si no se adapta, ese software puede convertise en un problema serio, con multas que pueden llegar hasta los 50.000 euros por ejercicio.

Qué es Verifactu y por qué se habla tanto de él

Verifactu es el nombre que se le ha dado al nuevo modelo de control de la facturación que impulsa la Agencia Tributaria. No es una aplicación concreta, ni un “programa de Hacienda” al uso. Es un reglamento que define cómo deben funcionar los llamados Sistemas Informáticos de Facturación (SIF).

El objetivo oficial es claro: impedir que los programas de facturación permitan borrar ventas, llevar cajas paralelas o manipular facturas sin dejar rastro. Algo que, hasta ahora, era posible en muchos negocios con software antiguo o soluciones improvisadas.

Para cualquier pyme gaditana esto se traduce en que el programa con el que hoy facturas tendrá que:

Registrar cada factura con fecha y hora.
Generar una especie de “huella digital” que garantice que no se ha modificado.
Encadenar esos registros para que cualquier borrado o cambio quede a la vista.
Conservar las rectificaciones sin eliminar el documento original.

Además, habrá dos formas de trabajar. Una en la que el programa envía datos a Hacienda casi en tiempo real y otra en la que los guarda en tu sistema pero siempre listos para ser enviados si la Agencia Tributaria los pide. En ambos casos, el requisito es el mismo, que el software cumpla la normativa.

Calendario: cuándo entra en vigor Verifactu y a quién afecta en Cádiz

La gran duda de muchos lectores del Diario de Cádiz es en qué momento entra esto en vigor de verdad. Las fechas clave son tres y conviene tenerlas en el calendario.

29 de julio de 2025

Es la fecha pensada para los fabricantes y distribuidores de software. A partir de ese día solo deberían comercializar programas adaptados al reglamento Verifactu. Es el pistoletazo de salida para que proveedores de TPV, programas de facturación y soluciones en la nube se pongan al día.

1 de enero de 2026

A partir de esa fecha, la obligación se aplica a las empresas que tributan en el Impuesto sobre Sociedades. Es decir, la mayoría de sociedades limitadas y anónimas. Muchas empresas de servicios, comercios de cierta dimensión y negocios hosteleros de la provincia de Cádiz entran en este grupo.

1 de julio de 2026

Desde ese día, la obligación alcanza al resto de contribuyentes que utilicen sistemas informáticos de facturación. Hablamos, en la práctica, de autónomos y microempresas que ya no facturan en papel, sino con algún tipo de programa o aplicación.

En resumen, 2025 será el año de transición. El momento en el que bares, tiendas, talleres y otros negocios gaditanos deberían revisar su programa de facturación y decidir si están donde necesitan estar antes de que llegue 2026.

Qué negocios gaditanos están más expuestos

La norma habla de “empresarios y profesionales que utilicen sistemas informáticos de facturación”, pero en la provincia de Cádiz eso tiene ejemplos muy claros.

Hostelería

Bares de barrio, cafeterías, restaurantes y chiringuitos que usan TPV para sacar tickets y facturas. Muchos llevan años con el mismo software y no siempre está claro si ese programa se actualizará o quedará obsoleto ante Verifactu.

Comercios

Tiendas de ropa, alimentación, ferreterías, papelerías y pequeños supermercados que trabajan con software de caja. En bastantes casos se trata de programas que se instalaron hace más de una década y que apenas han recibido actualizaciones.

Talleres y servicios

Talleres mecánicos, centros de estética, clínicas dentales, academias, asesorías y otros negocios de servicios que emiten facturas desde el ordenador y guardan los datos en discos duros o en la nube.

Autónomos “digitalizados a medias”

Fontaneros, electricistas, fotógrafos, monitores deportivos, repartidores, formadores. Muchos han dado el salto a apps sencillas para facturar, pero no saben si su proveedor se adaptará a las nuevas reglas.

En todos estos casos, la pregunta es la misma: el programa con el que hoy se emiten las facturas, ¿será válido también cuando Verifactu sea obligatorio o se convertirá en un riesgo?

El nuevo régimen de multas: por qué se habla de 50.000 €

Uno de los motivos por los que Verifactu ha saltado a titulares es su régimen sancionador. No se trata solo de poner orden en los programas, sino de fijar sanciones específicas para quienes fabriquen, vendan o usen software que no cumpla las condiciones.

Para los usuarios, es decir, las empresas y autónomos que utilizan esos programas, las sanciones pueden llegar a 50.000 euros por ejercicio si se considera que el sistema permite:

Llevar contabilidades ocultas.
No registrar correctamente todas las operaciones.
No garantizar la integridad y trazabilidad de las facturas.

El detalle importante es que la infracción se vincula a la tenencia o uso del software no conforme. No hace falta que Hacienda demuestre un fraude concreto en cuotas para plantear la sanción. Y además se habla de sanciones por ejercicio, lo que multiplica el riesgo si la situación se mantiene varios años.

Para muchos bares y comercios de Cádiz, donde los márgenes son ajustados, una sanción de ese tamaño puede ser simplemente inasumible.

Cómo saber si tu programa está en riesgo

No siempre es fácil saber si el software que utilizas en tu negocio cumple o no con Verifactu. Aun así, hay varios indicios que pueden ponerte en alerta:

El programa permite borrar facturas sin dejar rastro.
Se pueden cambiar numeraciones o fechas de forma libre.
No hay ningún sistema evidente de firma o huella digital de las facturas.
Se trata de un desarrollo a medida de hace años, sin soporte ni actualizaciones.
El proveedor no te ha hablado aún de Verifactu ni de un plan de adaptación.

Si reconoces tu caso en alguno de estos puntos, lo prudente es no esperar a 2026. Toca hacer preguntas y, si hace falta, valorar alternativas.

Cómo prepararse en un bar o comercio de Cádiz

La buena noticia es que todavía hay margen para que Verifactu no se convierta en un susto de última hora. La clave, como casi siempre, está en actuar con tiempo. Estos pasos pueden ayudar.

1. Haz un inventario de cómo facturas

Puede parecer obvio, pero muchos negocios no lo tienen claro. Conviene apuntar:

Con qué programa o programas emites facturas y tickets.
Si hay TPV, ERP, app en el móvil o una mezcla de todo.
Quién tiene acceso a cada sistema y qué puede hacer.
Si sigues usando hojas de cálculo o talonarios en paralelo.

Con ese mapa, tu gestor o asesor podrá orientarte mejor.

2. Pregunta a tu proveedor sin rodeos

Llega el momento de llamar o escribir a la empresa que te suministra el software y formular tres preguntas muy directas:

¿Vais a adaptar el programa a los requisitos de Verifactu?
¿En qué fechas tenéis previsto tener lista esa versión?
¿Tendré algún tipo de documento o declaración que acredite que el programa cumple?

Si la respuesta es clara, con calendario y compromiso, podrás planificar. Si es vaga o inexistente, quizá sea hora de empezar a comparar alternativas.

3. Reúnete con tu gestoría

En muchos negocios de Cádiz, la relación con Hacienda pasa siempre por la gestoría. Verifactu también va a afectar a cómo trabajan ellos:

Pregunta qué programas recomiendan y con cuáles están acostumbrados a trabajar.
Consulta en qué momento del año ven mejor hacer el cambio, para no mezclarlo con cierres complicados.
Asegúrate de que podrán importar correctamente los datos del nuevo programa.

4. Elige un buen momento para el cambio

Cambiar de programa nunca es totalmente indoloro. Para reducir problemas:

Evita los primeros días de enero y de julio de 2026.
Elige un mes con algo menos de carga de trabajo, dentro de lo posible.
Reserva uno o dos días para pruebas y para que el personal se acostumbre al nuevo sistema.

La idea es que, cuando Verifactu sea obligatorio, el programa ya lleve un tiempo funcionando.

5. Guarda pruebas de que has actuado con diligencia

Si algún día tienes una comprobación o una inspección, será mucho más fácil defender tu posición si puedes enseñar:

Contratos y correos con tu proveedor donde se hable de Verifactu y del cumplimiento de la normativa.
Procedimientos internos de facturación y corrección de errores.
Evidencia de que el cambio de programa se hizo antes de las fechas límite.

No se trata solo de cumplir, sino de poder demostrar que lo has intentado hacer bien.

Preguntas frecuentes sobre Verifactu en Cádiz

Si emito pocas facturas, ¿también me afecta Verifactu?

Sí, si las emites con un programa o aplicación. La norma no se fija tanto en cuántas facturas haces, sino en si utilizas un sistema informático de facturación. Solo quienes siguen facturando en papel puro y duro quedan parcialmente al margen, al menos de momento.

Verifactu, ¿es lo mismo que la factura electrónica obligatoria?

No. La factura electrónica se refiere al formato en el que se emiten y se envían las facturas. Verifactu se centra en cómo deben comportarse los programas que las generan y guardan. Son normas distintas, aunque forman parte del mismo movimiento hacia una mayor digitalización y control.

¿Me pueden sancionar solo por tener un programa viejo instalado?

Si ese programa permite prácticas que la nueva normativa quiere evitar y lo sigues utilizando cuando Verifactu sea obligatorio, puede existir riesgo de sanción. Por eso es tan importante revisar qué software tienes y qué se puede hacer realmente con él.

¿Habrá alguna herramienta gratuita de Hacienda para facturar?

La Agencia Tributaria trabaja en soluciones simples para perfiles muy básicos, pero suelen estar pensadas para quienes facturan poco y con poca complejidad. Para bares, comercios y negocios con más movimiento, lo normal será seguir utilizando programas especializados que se adapten al reglamento.

¿Es buena idea esperar a ver si cambian las fechas?

Las fechas principales ya están fijadas en la normativa. Puede haber ajustes menores, pero no parece razonable basar toda la estrategia en una posible prórroga. Aprovechar 2025 para hacer los deberes da más margen y reduce el riesgo de prisas de última hora.

Verifactu puede sonar a tecnicismo, pero para los bares, tiendas y pequeñas empresas de Cádiz es un cambio muy real en la manera de facturar. Saber cuando entra en vigor Verifactu, revisar el programa con el que cobras hoy y hablar con tu proveedor y tu gestoría con tiempo puede ser la diferencia entre vivir 2026 como un susto o como el año en que tu negocio se puso al día y ganó tranquilidad frente a Hacienda.