Cómo elegir un coche de segunda mano sin llevarte sorpresas: consejos clave

¿Buscas un coche de segunda mano? Te damos las claves para elegirlo sin llevarte sorpresas y poder, realmente, disfrutar de un vehículo con la calidad que esperas y a precio reducido.

Tips para elegir un coche de segunda mano

Si te preguntas qué mirar en un coche usado, presta atención. Estos son los principales consejos a tener en cuenta a la hora de adquirir un vehículo de segunda mano.

Kilometraje real

Sin duda, el kilometraje es uno de los mejores parámetros para ver cuál ha sido el uso del coche previamente y, con ello, poder delimitar también su desgaste. Si el vehículo en cuestión presenta un alto kilometraje es fácil que acabe teniendo más averías y requerir más mantenimiento.

Por tanto, es importante determinar cuál es el kilometraje real del vehículo, algo que podrás ver si coincide con el estado general del coche. Para evitar sorpresas desagradables en este sentido siempre es importante acudir a un lugar de confianza como es Carsol Algeciras, un concesionario con experiencia en la venta de coches de segunda mano Algeciras y que es todo un referente.

Estado del motor

Sin duda, otro punto de gran importancia es revisar el estado en el que se encuentra el motor. Es fundamental antes de adquirir el vehículo que un profesional de confianza realice una inspección completa de esta zona del vehículo, así como del sistema de frenos y la suspensión. Detectar posibles problemas mecánicos a tiempo te permitirá no solo acertar en tu compra, sino también ahorrar en futuras reparaciones.

Revisa toda la documentación del coche

Todo vehículo tiene asociada una documentación. Es importante que solo compres un coche de segunda mano cuando cuente con toda la documentación en regla. Aquí tienes que ver desde la ficha técnica, a que cuente con seguro e ITV al día. Para garantizar que todo es correcto habrá que verificar que los datos coincidan con el coche y con el vendedor. Desconfía si falta algún documento de este tipo porque podría ser indicativo de algún tipo de problema.

Comprueba el número de bastidor

El número de bastidor es un código único que tiene cada coche y sirve para identificarlo. Es fundamental que este código que se puede encontrar en el coche sea el mismo que el que hay en los documentos. Con esto evitarás comprar un coche robado o con alteraciones. Comprobar esta numeración es sencillo: generalmente suele encontrarse en el chasis del coche y también se recoge en la documentación oficial.

Revisa el estado de la carrocería

Por supuesto, también es importante revisar en qué estado se encuentra la carrocería del vehículo, puesto que es una parte del coche que puede decir mucho sobre el trato que se ha dado al vehículo. Revisa si existen señales de corrosión, abolladuras, arañazos, etc, para ver si el coche ha podido tener un accidente importante. Del mismo modo, es importante también comprobar el estado en el que se encuentran los neumáticos, puesto que si se observa un desgaste irregular podría estar asociado a problemas con la alineación o la suspensión del coche.

Pruébalo

Siempre que sea posible es importante hacer una prueba de conducción del vehículo. Esto es así porque, sin duda, es el mejor modo de poder valorar cuál es el estado del coche de forma real. Te permitirá desde escuchar el motor, a verificar el funcionamiento de los frenos, cómo funciona la dirección y también comprobar si hay ruidos o vibraciones extrañas. Por último, también te permitirá ver cómo funciona el embrague y la caja de cambios.

Consulta los precios medios del mercado y el coste de su mantenimiento

Al comprar un coche de segunda mano es fundamental también que tengas una idea de cuáles son los precios medios que se pueden encontrar en el mercado en función de las características del vehículo que buscas. En este sentido, lo que se recomienda siempre es comparar precios de coches similares: por kilométraje, tipo de vehículo o años.

Del mismo modo, también es importante informarse de los gastos asociados al vehículo que deseas. Aquí es importante tener en cuenta factores como los gastos del seguro y los que estén asociados a aspectos como el propio mantenimiento o los impuestos. Cabe recordar que no todos los coches tienen asociados los mismos gastos y es importante conocer un poco esto para evitar sorpresas.